El segundo capítulo tiene título
Barça y Madrid, 21 años después, se juegan la Copa en una final que sólo se ha dado en cinco ocasiones
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Un estadio y una ciudad tomada por dos aficiones. La final de Copa. El partido del año por el colorido neutral de las gradas. La mitad azulgrana, la mitad blanca. Madrid y Barça, Barça y Madrid por un título a partido único, una circunstancia que no se daba desde hace 21 años. Un capítulo más de esa partida de ajedrez que comenzó el sábado en tablas.
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Como el fútbol es un estado de ánimo, ambos se presentan con la interpretación ganadora de ese primer duelo del Bernabéu. El Barça ha leído ese empate como la sentencia de la Liga y la reafirmación de su estilo frente al planteamiento defensivo de Mourinho. Por su parte, el Madrid interpretó la igualada como una victoria. No en el marcador, pero si anímica porque cortó la racha de cinco derrotas consecutivas. Empató con diez y la última carga ofensiva fue suya.
Ambos se presentan como ganadores anímicos del duelo del sábado
Contrastada la ambición de su equipo, Guardiola ha trabajado en los últimos días para que sus jugadores afronten la final sin dramatismo. Desea que sus muchachos paladeen cada detalle de un duelo tan especial. Un encuentro que el Barcelona afrontará con "Pinto y diez más", asegura el técnico del Barça. Analizado el clásico del Bernabéu, insiste Guardiola en que el Barça necesita mejorar la circulación del balón para evitar que el Madrid trabe su fútbol en la medular y, sobre todo, el juego en profundidad.
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Recuperado Mascherano, que no disputó el primer clásico de la serie por sanción, el de Santpedor medita reservar a Puyol. De momento, el capitán, con unas leves molestias musculares, entró en la convocatoria. También Adriano, renqueante en los últimos días. De hecho, el Barça viaja hoy a Valencia con una amplia expedición. Estarán en Mestalla todos los jugadores de la primera plantilla, lesionados incluidos, y los futbolistas del filial que han participado en el torneo, excepto Sergi Roberto y Bartra, concentrados con la sub-20. También habrá pleno de técnicos y auxiliares.
Enfrente, Mourinho desveló parte de sus cartas: "Jugaremos con un delantero centro. Utilizaré cuatro defensas, tres medios y tres delanteros". La duda está en si repetirá con Pepe como tercer pivote. "Seremos Sergio y diez más". El equipo consiguió no desestructurarse ante el toque del Barça. No tendrá problemas Khedira, aunque se retiró del entrenamiento. Mou se conjuró con los jugadores. La sesión tardó más de 45 minutos en empezar. La plantilla escuchó cómo quiere su técnico que se desarrolle la final.
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Recuperado Mascherano, Pep medita reservar al capitán Puyol
Las dudas sobre qué hará Mou en este segundo acto también afectan a Özil. Su suplencia fue la otra gran sorpresa del primer clásico de la serie. Su principal problema tiene muy poco que ver con el fútbol y mucho con el físico. Si el Madrid quiere ahogar arriba al Barça, su tiempo será limitado. También hay incertidumbre en la punta. En el partido de Liga, Benzema no tuvo peso en el juego ofensivo. Adebayor, con su juego de espaldas a puerta y su capacidad para mantener el balón, es otra opción. Igual que Higuaín.