El Real Madrid es el equipo más goleador de la Liga española. También el segundo menos goleado. Entre los responsables de lo primero es fácil señalar nombres como Van Nistelrooy, Raúl o Guti. El éxito defensivo tiene otros protagonistas: los centrales, Casillas... Sin embargo, hay un jugador que se puede colgar medallas por su labor en ambos lados del campo: Sergio Ramos. El lateral lleva en Liga tres goles, lo que le convierte en el cuarto máximo artillero, y dos asistencias de gol, que le coloca tercero entre los madridistas.

En defensa lo demuestra con sus recuperaciones. Es, con diferencia, el jugador que más balones roba del plantel madridista. Sus 92 robos dejan en nada los 60 balones recuperados por Cannavaro, segundo mejor madridista en esta clasificación. En este apartado no sólo lidera al Madrid, también es el mejor jugador de campo en toda la Liga.

Una de las claves de Sergio Ramos está en que es un jugador total, no existe zona en el campo que el lateral no pise. Ramos es el jugador que más acciones defensivas hace en su propia área y en las bandas. También es el que más recuperaciones consigue desde su frontal hasta la medular, el mejor defensor madridista del medio del campo y, por si todo esto fuese poco, suma 10 acciones defensivas en la frontal del área contraria, cifra sólo superada por Guti, mariscal de esa zona del campo. Es decir, cubre el 80% del campo de juego.

Se podría pensar que Ramos defiende a lo largo de todo el campo, pero siempre encorsetado en la derecha. Falso. Los datos se empeñan en refutarlo. Sergio Ramos es el que más acciones defensivas ha realizado en la derecha sí, pero también lidera las acciones defensivas en su propia área, es el segundo jugador que más defiende en la banda izquierda y un habitual en la zona que debería ocupar Diarra. Sergio Ramos está en todas partes.

Rey de la banda derecha

En ataque, más de lo mismo. Es habitual verle iniciar el juego desde las proximidades del área madridista, es el tercer jugador que más combina en el medio del campo y también está entre los primeros en la zona final del campo. La banda derecha es un reino donde Ramos es el monarca absoluto, sólo Guti aparece con asiduidad por el costado de Ramos. La presencia del sevillano se extiende hasta límites increíbles cuando se ve que es el madridista que más ha pisado el área pequeña contraria y el cuarto jugador blanco que más veces ha aparecido en las áreas grandes de los rivales.

Esta presencia superlativa se hace notar en el resto de factores que definen un partido. Ramos recupera como nadie en el equipo, es el cuarto jugador que más remata, el tercero que más balones lleva al área contraria, el segundo que más pases buenos realiza, el segundo que más faltas realiza y el tercero que más recibe. Ha llegado incluso a ejercer de portero. En una ocasión evitó que Casillas encajara un gol sacando el balón en la misma raya.

Con estos datos y las señales de poderío que emite, es comprensible que el entrenador le haya alineado en todos los partidos. Pasado mañana ante el Mallorca, Ramos, sancionado, no estará. Schuster y el equipo notarán su ausencia.