Pitos para Berdych
Almagro le dio un bolazo al checo, abucheado por no aceptar las disculpas
Publicidad
En la línea de fuego, los pelotazos están a la orden del día, forman parte del mundo del tenis, tan natural como empuñar una raqueta. Normalmente se solventa con una petición de perdón, un par de miradas y poco más. El código no escrito del deporte, rico y variado en el caso del tenis, contempla así la historia. Los aficionados lo conocen y respetan sin hacer ruido y son muy extrañas las ocasiones en las que esto es noticia.
Publicidad
El murciano perdió el partido porque jugó peor en los momentos decisivos
Ayer lo fue. El que dio el pelotazo fue Almagro, el que lo recibió, Berdych. Y fue el checo el que le negó la mano al español posteriormente, una infracción en ese código de conducta: pase lo que pase en la cancha, cuando el partido termina se termina con un saludo al rival. El público de Melbourne no dudó y respondió con una fuerte pitada. Esas cosas no se hacen, pensaron los aficionados al abroncar al ganador del encuentro. Berdych casi no podía ser escuchado en las preguntas que se le hacen al ganador después del encuentro, el sonido del viento le enmudecía. "Me ha intentado dar en la cara teniendo toda la pista libre". En realidad, la pelota golpeó en el brazo del checo y la jugada fue un golpeo de lo más normal. Almagro respondió después: "Me voy con la cabeza muy alta conforme lo hecho y en especial por todo el apoyo del público, que demuestra lo sucedido. Ellos sí son conscientes de lo que sucedió en la pista".
Nadal pasó a cuartos en un partido sin problemas contra Feliciano
Publicidad
El talentoso Berdych, que ya ha tenido problemas en otros escenarios, será el próximo rival de Nadal. En el partido contra Almagro ganó porque supo jugar mejor que el español los instantes calientes. El murciano ganó el primer set y perdió los tres siguientes en el tie break.
Nadal tampoco tuvo problemas con Feliciano. El balear sigue dominando Melbourne, pasando sin preguntar ronda a ronda contra rivales que no terminan de forzar su mejor juego. Un 6-4, 6-4 y 6-2 deja bastante claro cómo fue un encuentro en el que Nadal tuvo infinitas oportunidades para romper el servicio de Feliciano. "Ganar en tres sets está muy bien. Las sensaciones son positivas en el torneo y estoy feliz de estar en cuartos de final", comentó el balear. El año pasado, la aventura australiana se detuvo en esa ronda. Fue Ferrer quien lo dejó fuera sin llegar siquiera a semifinales. Si pasa se tendrá que enfrentar al que gane el partido entre Federer y Del Potro. Rondas finales, palabras mayores.