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"¡Es un momento de la hostia!"

El héroe de Stamford Bridge chutó "con toda el alma"

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"Cuando se trabaja, se tiene recompensa". Iniesta apenas podía articular palabra por los continuos abrazos de sus compañeros. El éxtasis se desparramó sobre el césped de Stamford Bridge. La explosión llevó a todos sus componentes al córner de la gloria en el que Iniesta recibía de rodillas su ascensión al olimpo culé. Su gol en el último suspiro llevó al Barcelona a la final de Roma. Un gol que no imaginaba el manchego, un derechazo "que di con toda el alma. Merecíamos estar en la final por todo. La temporada que llevamos, el juego que hacemos... Cuando se trabaja se tiene recompensa y este es un momento de la hostia".

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Etoo desvelaba una clave para que la fe del equipo se mantuviera: "La charla de Pep [Guardiola] en el descanso ha sido clave. Nos habló muy bien. Nos dijo que nos lo teníamos que creer hasta el final y, si al final no conseguíamos nuestro objetivo, sería porque estaba escrito así".

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Tal y como les había solicitado su técnico, los jugadores azulgrana creyeron hasta el final, hasta ese momento en que Iniesta atrapó el balón, lo paró con la sutileza y la clase que sólo los grandes futbolistas atesoran y se inventó un chut imposible de parar para Cech. "Si normalmente ya controlas pocas cosas, en situaciones así, aún menos. Esto es producto del talento", apuntó Guardiola, casi sin voz, sobre el gol de Iniesta.

El técnico del Barça lo había celebrado como el que más sobre el césped, con sus ayudantes primero y con sus jugadores después. Guardiola corrió como un loco y se abrazó a Messi, una, dos, tres veces, mientras hablaba y hablaba.

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"La fiesta la hemos tenido más en el campo que en el vestuario. Los jugadores estaban muertos, destrozados exhaustos. Lo hemos celebrado más con la gente que ha venido y nos ha apoyado", señaló el técnico azulgrana. Después, confesó: "Estamos muy contentos, esto está muy bien. Es un sueño, estamos en Roma".

"Iremos a comer pasta", añadió en tono jocoso antes de desgranar las claves del encuentro: "La consigna era creer hasta el final y lo hicimos. El equipo ha atacado desde el primer minuto, nos ha costado mucho encontrar espacios, pero no hemos desistido. Es una gran satisfacción estar Roma porque ha sido muy, muy duro, nos ha costado mucho".

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