No hay rival que se le resista al Barça de Pep Guardiola, pero el de Santpedor no ha conseguido vencer todavía al Valencia en Mestalla. 'No es por el estadio, allí ganamos una final de Copa', recordó ayer Tito Vilanova, mano derecha del técnico. 'El problema es el equipo de Emery. El año pasado crearon incluso más oportunidades que nosotros y ahora llevan 11 partidos sin perder'. Guardiola, con lumbalgia aguda, no pudo dirigir el último entrenamiento de su equipo. Acudió a la sesión renqueante y a media mañana se marchó a casa dolorido.

Aun así, hoy se le espera en Valencia. Como a Xavi, que, tras ochos días de baja, regresó a una convocatoria. Puyol, Valdés y Jeffren, en cambio, seguirán una jornada más en la enfermería.

El partido en Mestalla será también el primero de Villa ante la que fuera su hinchada durante las últimas cinco temporadas. El delantero, que prepara con ilusión su regreso a Valencia, esta mañana debe asistir a un juicio en Avilés. Concluido este compromiso, volará en un avión privado hasta el aeropuerto de Manises para sumarse a la expedición catalana.

Guardiola confía en el concurso del Guaje, en racha goleadora, y prevé un Valencia aguerrido. 'Presionan de maravilla la salida del balón y luego se repliegan muy bien atrás para robar y correr a la contra', destacó Vilanova antes de alertar del peligro del equipo ché a balón parado.

Y, cuestionado también por si la victoria azulgrana significaría dar una estocada decisiva a la Liga, aclaró: 'No afrontamos los partidos pensando en si daremos un golpe moral al Madrid, los afrontamos pensando en ganar. Hagamos lo que hagamos, la Liga no quedará decidida'.

En el vestuario del Valencia, la reciente victoria en San Mamés aumentó si cabe el optimismo. El líder no amedrenta al equipo de Unai Emery. 'Si ellos consiguen un porcentaje de posesión como el que tienen habitualmente, somos carne de cañón', apuntó ayer el técnico. Lesionados Albelday Aduriz, sancionados Topal y Bruno Saltor y castigado Miguel, a Emery, que ayer defendió la 'nobleza' de David Navarro, le costará armar su defensa.