MADRID.- "Yo trabajo siempre para lograr el oro olímpico". Máxima ambición. Bajo esta premisa acudirá la taekwondista Eva Calvo a los que serán sus primeros Juegos el próximo mes de agosto, como si fuera toda una veterana. Sin embargo, pese a estrenarse en una cita olímpica, esta madrileña de 24 años (Leganés, 1991) es en estos momentos una estrella mundial en su deporte y una de las bazas más importantes de la delegación española para lograr una presea.

Hace diez años decidió cambiar el atletismo por las artes marciales junto a su inseparable hermana Marta. Ella tenía 14 años y su hermana, 9. Su padre llamó a la puerta adecuada. Por aquel entonces, José María Martín, 'Xixo', estaba pateándose Leganés para promocionar la apertura de un gimnasio. Desde entonces sus caminos no se han separado y solo se han guiado por el trabajo riguroso y el éxito.

Eva y Marta lo comparten todo, no solo la sangre. Compañeras de entrenamiento, pasan horas y horas practicando, recibiendo sin cesar patadas fraternales. Cuidan al máximo su dieta, siempre a expensas de un deporte bajo la dictadura de los pesajes. Sufren desvelos conjuntos previos a los campeonatos y se privan, también juntas, de lo que la mayoría de jóvenes de su edad disfrutan en el tiempo libre.

Todo por y para un deporte, el taekwondo, que ya dio a España tres de las 17 medallas logradas en Londres y que en Río confía en ofrecer nuevas alegrías. Es tal su simbiosis que en el pasado Mundial se colgaron el mismo día la medalla de plata, cada una en su peso. La cara amarga la vivieron en el reciente preolímpico de Estambul, donde Marta se quedó a las puertas de poder acompañar en el tapiz de Río a su hermana Eva. Estará en las gradas pero la espina costará arrancarla.  

En el silencio de la sala del pabellón Olimpia nos reciben las dos, en pleno estiramiento después de un duro entrenamiento bajo las órdenes de Xixo. Última hora de la mañana. Ambas acceden sin perder la tímida sonrisa a cualquier requerimiento. Las cámaras y los trípodes siguen intimidando. Una silla vacía en el tatami espera a ser ocupada por Eva. Y Marta hace de sparring gustosa. Tras minutos de charla distendida, la entrevista espera. Ella, sin saberlo, se convierte en la primera protagonista del serial que estrena PÚBLICO con los deportistas que nos harán vibrar del 5 al 21 de agosto en Río de Janeiro.

Pregunta. El año pasado quedó subcampeona del mundo, logró la medalla de bronce en los Juegos Europeos de Bakú y logró la clasificación para los Juegos de Río. Más no se puede pedir

Respuesta. La verdad es que el 2015 fue un año muy bueno. Además, como desde mayo ya tenía asegurada la plaza para Río, a partir de ahí pude tomármelo con más calma y pude trabajar para mejorar en mi taekwondo y no para conseguir más puntos.

Y este año llegan los Juegos de Río, su primera experiencia olímpica... ¿Qué supone para Eva Calvo?

"Para mí ir a los Juegos lo supone todo. Es para lo que he trabajado toda mi vida. Ahora todas mis miras están puestas en agosto"

Para mí lo supone todo. Es para lo que he trabajado toda mi vida. Ahora todas mis miras están puestas en agosto. Es verdad que me quedan por disputar campeonatos antes pero el objetivo son los Juegos. Voy con mucha ilusión de vivir la experiencia, a ver qué me espera.

¿Y qué espera de los Juegos? ¿Qué objetivo se plantea? ¿Sueña con el oro?

Mi objetivo siempre es ese. Yo trabajo para conseguir el oro olímpico pero supongo que todas las chicas que vayan también. Sé que va a ser muy duro pero estoy trabajando para conseguirlo.

En Londres 2012, el taekwondo español conquistó un oro y dos platas. Les han puesto el listón muy alto

Si (risas), la verdad es que sí. Pero más que añadirnos una presión, creo que es una motivación extra para nosotros. Vamos intentar llegar a lo que llegaron ellos y si lo podemos mejorar, perfecto.

En Río repite Joel González, que además defiende el oro olímpico y es el gran referente del taekwondo español en estos momentos, ¿qué valora de él?

Joel siempre ha sido un referente para todos. Él, junto a Brigitte Yagüe, son gente muy veterana, que han vivido muchos campeonatos y que siempre están dispuestos a ayudarte o darte cualquier consejo, y yo valoro mucho eso. Y dentro del combate, me encanta la forma de Joel de ir graduando el combate. No se pone nunca nervioso y es capaz de esperar para conseguir el punto que le haga ganar. Por eso, destacaría que es muy frío de mente y eso me gusta mucho.

Su hermana Marta ha estado a un paso de poder acompañarla a los Juegos. Una pena que se haya quedado a las puertas, ¿no?

Sí, fue un palo bastante duro para ella y para todos. Teníamos la esperanza en el preolímpico de que se clasificaran ella y Jesús (Tortosa) y se quedó ahí por decisión arbitral, por un detallito. Pero bueno, ya se le ha pasado el disgusto y ya está otra vez motivada para seguir trabajando y luchar para estar en los próximos Juegos.

Aun así, ¿irá también a Río?

Esperemos que sí porque puede ser mi suplente en el peso y además me puede ayudar a entrenar en los Juegos.

¿Qué preparación está llevando a cabo de aquí a los Juegos?

De momento no hemos cambiado mucho la forma de entrenar pero sí hemos aumentado las horas de entreno. Ahora entreno más días de doble sesión, por la mañana y por la tarde. De cara a los Juegos, todavía no sabemos cómo va a ser la planificación de los entrenamientos. En mayo tenemos el Europeo y nos concentrarán para ese campeonato pero de ahí en adelante no sabemos en qué va a consistir.

¿Ha recibido alguna recomendación por parte del COE o de la Federación sobre el virus Zika?

Todavía no nos han dicho nada, supongo que estarán esperando un poco a ver cómo se desarrolla. Pero la verdad es que en el taekwondo estamos ya acostumbrados a ir a países un poco peligrosos (risas). Estuvo el equipo español en París cuando se perpetraron los atentados, hemos ido a Egipto y también nos tocó un atentado…

¿Y cómo vivió esos momentos?

En París, estaba mi hermana Marta y a mí a mis padres nos pilló en casa. Y lo vivimos con un poco de miedo porque no sabíamos muy bien lo que estaba pasando en los primeros momentos. Sobre todo mi madre sí que estaba más preocupada, pero intentamos que no se nos notara mucho en la voz para que los que estaban allí no se dieran cuenta de la gravedad de lo que estaba sucediendo y estuvieran lo más tranquilos posible. Pero estas son cosas que te toca vivir en el deporte, que de tanto viajar a veces te suceden cosas que no son agradables.

Y ahora con el Zika, ¿tiene algo de preocupación o queda todavía mucho?

De aquí a que se disputen los Juegos todavía quedan varios meses y supongo que las autoridades lo controlarán para que sea seguro para los competidores. Además, los deportistas vamos a estar encerrados en la Villa Olímpica y ahí habrá menos riesgo. Pero vamos, todavía no nos han dicho nada.

¿Qué parte de culpa tiene en su éxito su entrenador, José María Martín 'Xixo'?

‘Xixo’ tiene toda la culpa. Fue él el que nos inició en el taekwondo y ha sido él el que nos ha acompañado en todos los campeonatos, ha estado en todos los entrenamientos… Creo que es el máximo apoyo que tenemos todos dentro del taekwondo. Siempre está ahí, en los momentos buenos, en los momentos malos… Sin él no hubiera conseguido nada.

¿Cómo empezó en el taekwondo?

Empezamos mi hermana y yo a la vez, justo en septiembre va a hacer diez años. Nosotras hacíamos atletismo y queríamos hacer un arte marcial y dentro de las artes marciales, la que más utilizaba técnicas de pierna era el taekwondo. Mi padre vio un cartel que había puesto ‘Xixo’ anunciando que abría una escuela de taekwondo en el barrio (en Leganés). Así que probamos y nos gustó mucho.

¿Cómo es compartir la pasión por el mismo deporte con su propia hermana? ¿Hay mucha rivalidad? ¿Cómo es su relación fuera del gimnasio?

Rivalidad no hay, más bien mi hermana es un apoyo. Además, nosotras tenemos un punto extra dentro del taekwondo al poder compartir todos los momentos juntas. Ahora, que estamos a alto nivel, viajamos a todos los campeonatos juntas, entrenamos siempre las dos… Tenemos mucha suerte de poder estar en esto las dos juntas.

¿Y cómo llevan sus padres tener a sus dos hijas como referentes mundiales del taekwondo?

"Mi madre se lleva nuestras medallas al trabajo para enseñárselas a las amigas y le gusta mucho ir contando por ahí a los vecinos lo que hacemos"

Los dos están muy orgullosos. Mi padre, que es más de deportes, ve muchos campeonatos y le gusta mucho seguirnos. Mi madre lo lleva mal a veces porque cuando hay campeonatos nos vamos las dos y se le queda la casa un poco vacía. Pero en general, están muy contentos los dos.

¿Es verdad que tu madre se lleva las medallas al trabajo?

Sí, sí (risas). Mi madre se lleva nuestras medallas al trabajo para enseñárselas a las amigas y le gusta mucho ir contando por ahí a los vecinos lo que hacemos y lo que conseguimos.

¿Qué has aprendido de tus padres?

"Mis padres me han enseñado que trabajando con constancia se consiguen muchas cosas"

Pues lo mismo que decía antes de ‘Xixo’ pero trasladado a la vida. Son los que siempre nos han ayudado en todo, nos apoyado a nuestras decisiones, como la apuntarnos a taekwondo… Y también en los momentos duros, que han sido bastantes. Y son un ejemplo para mí de trabajo duro, me han enseñado que trabajando con constancia se consiguen muchas cosas y es el ejemplo que voy a intentar seguir a lo largo de mi vida.

¿Cuántas horas entrenas al día?

Cuando tenemos doble sesión, entrenamos dos horas en cada sesión. Es decir, cuatro al día. Y los días que solo entrenamos en una sesión, pues dos horas.

¿Necesitas llevar una alimentación estricta?

Sí, porque en el taekwondo las categorías van por peso y yo, por ejemplo, compito en menos de 57 kilos y tengo que controlar bastante el peso. Tengo dieta perpetua. Pero se lleva bien.

Además, estudia Matemáticas en la UAM, ¿qué tal lleva compaginar una carrera con el deporte de alto nivel?

Normalmente lo llevo bien pero este año, con los Juegos, es más difícil. Por eso, este semestre he congelado la matrícula de Matemáticas de la UAM porque en estos momentos es imposible poder asistir a clase. Y así, en septiembre volveré a retomar la carrera. Pero, para no estar del todo parada, me han becado en la UCAM y me he matriculado en Ingeniería Informática y voy a estudiar a distancia desde casa, que ahí sí que tengo tiempo.

Aunque te queda mucha carrera en el taekwondo, ¿tiene ya algún plan de futuro concreto? ¿hacia dónde quiere orientar su vida laboral?

En cuanto al taekwondo, solo miro de aquí a los Juegos. Y luego ahí, ya pensaré si continuar, si subir de categoría, si seguir en la misma… Todavía no he pensado más allá de agosto. Y en el plano laboral, todavía me queda mucho para acabar la carrera aunque a mí me gustaría hacer algo relacionado con las Matemáticas, si puede ser.

Tanto tiempo de dedicación al taekwondo, le quitará de hacer otras muchas cosas en la vida. ¿Le compensa?

Siempre me han preguntado que qué pierdo con el taekwondo y es verdad que me quita tiempo para estar con la familia, con los amigos, para salir por ahí, poder comer guarrerías (risas) y todas esas cosas. Pero claro que me compensa perder una parte de eso porque si no dejaría el taekwondo. Si no estuviera contenta y no me aportara mucho, lo dejaría. Pero también sacamos momentos para estar con los seres queridos aunque se reduce un poco. Pero lo hacemos con mucho gusto.

¿Teme a la derrota?

"Al principio salía a los campeonatos con miedo a perder pero así al final no disfrutas con lo que haces. Ahora he aprendido que me tengo que dedicar a intentar hacerlo bien y dar lo mejor de mí en los campeonatos"

Al principio salía a los campeonatos con miedo a perder pero así al final no disfrutas con lo que haces. Ahora he aprendido que me tengo que dedicar a intentar hacerlo bien y dar lo mejor de mí en los campeonatos. A veces, claro que se pierde, nadie puede hacer una carrera perfecto. Hay momentos duros cuando pierdes varias veces seguidas y piensas que no estás haciendo algo bien. Pero trabajando siempre se consiguen las cosas y te ayuda a volver a estar ahí. Tuve una época en la que caí en dos campeonatos seguidos en el primer combate y sí que es duro, pero hay que asumir que el resto de chicas también compiten y todas queremos ganar y no solo depende de ti.

Los dos campeonatos que comenta, ¿podrían ser los peores que ha vivido en el taekwondo?

En los propios campeonatos, la derrota pasa y te olvidas. Si fue una época en la mientras entrenas le das vueltas y es duro de cabeza. Pero son cosas que pasan y, como digo, no se puede ganar siempre.

¿Y cuál ha sido el momento más feliz?

Hasta ahora, yo creo que el Mundial de 2015 cuando quedamos medalla de plata Marta y yo y también Joel González. Además, las conseguimos los tres el mismo día. Yo competía el día anterior pero mi semifinal y mi final fueron en su día. Entonces, coincidimos todos el mismo día. Primero salí yo, después Marta y después Joel. Y conseguimos los tres la plata casi a la vez. Fue un momento de mucha alegría, porque además vinieron mi madre, mi prima, también estuvo ‘Xixo’… Así que fue un momento muy bonito.

Y eso que dicen que la plata es la medalla más amarga

Ya, eso sí. Al momento de perder… dices ‘menuda mierda’, pero después se te pasa y te das cuenta de que has conseguido todo un subcampeonato del mundo.

Este año cumples 25 años, ¿qué sueños le quedan por cumplir a Eva Calvo tanto en el taekwondo como en la vida?

Con respecto al taekwondo, mi sueño está a punto de cumplirse, que es ir a los Juegos. Me parece una experiencia fantástica y ha sido mi sueño desde que empecé en el deporte. Tengo mucha ilusión por ir. Y en la vida, todavía me queda mucho por vivir y ya veré a ver lo que me depara cuando termine con el taekwondo.