El ejecutor de Pellegrini en el Madrid busca hoy trabajo en LinkedIn
"En el Bernabéu no sabes cuál es el truco para vencer"
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MADRID.- Nunca sabes donde está tu ejecutor. Ni el precio de su currículum ni de su cabeza, como comprobó Manuel Pellegrini (Santiago de Chile, 1953) aquella noche del 9 de noviembre de 2009. Un tipo que hoy busca trabajo en LinkedIn, un portero que hoy vive en Don Álvaro, a 9 kilómetros de Mérida, impidió que el Real Madrid remontase en el Bernabéu aquel 4-0 del Alcorcón de Copa del Rey en el partido de ida.
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Juanma se colocó debajo del larguero como esta noche hará Joe Hart en el Manchester City. Es más, hasta podría ejercer de ejemplo para el portero inglés. “Aquel día mi parada decisiva fue a los tres minutos cuando impedí un mano a mano frente a Van Nistelrooy. Mi experiencia como portero es que los inicios marcan los partidos. Y si el Madrid hubiera marcado pronto igual nos cae la mundial”.
"En el Bernabéu no sabes cuál es el truco para vencer"
Hoy, se podría hacer una página web de aquella noche, las diferencias sociales que separaban al Real Madrid del Alcorcón, a Pellegrini de Juanma que, pese a todo, nunca fue un portero mediático. Ni siquiera en Grecia, en el Aris de Salónica, donde “el idioma te distanciaba mucho” . De ahí que, si hay que elegir, siempre elegiremos aquella noche en el Bernabéu que, para él, pudo ser como la de Dino Zoff en la final del Mundial 82. “De los éxitos de uno siempre hay gente que sale damnificada. Nuestra idea no era hacer daño a Pellegrini, sino vencer al Madrid. Pero esa es la locura del fútbol, el hecho de pensar que yo estuve ahí hoy me parece como una película. Aquello es el Bernabéu, donde nunca sabes cuál es el truco para vencer”, explica hoy Juanma.
Hoy, se podría hacer una página web de aquella noche, las diferencias sociales que separaban al Real Madrid del Alcorcón, a Pellegrini de Juanma que, pese a todo, nunca fue un portero mediático
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Esa noche, sin embargo, supieron doblegar al diez veces campeón de Europa. “No tuve miedo. En realidad, no lo tuvimos nadie en aquel Alcorcón. Dijimos: ‘Vamos a intentarlo’. Y lo intentamos. Nos dimos la mano y lo hicimos. El premio nos permitió vivir en una nube durante meses. Todavía lo recuerdas y te preguntas cómo fue posible”, añora desde su domicilio mientras sus dos pequeños, de seis y cuatro años, se niegan a quedarse quietos. “Mi mujer está trabajando en el restaurante de un familiar”.
Busca trabajo desde que una hernia le alejó del fútbol
Pellegrini pertenece a otro mundo en Manchester, alejadísimo de lo que vive hoy Juanma y hasta de los 300.000 euros que, según la leyenda, el Arís de Salónica pagó al Alcorcón por el portero. Un dinero que Pellegrini gana en quince días en Manchester. Juanma, sin embargo, busca trabajo desde que una hernia discal le concedió en el fútbol fecha de caducidad. El dolor hoy no le impide vivir en paz pero sí regresar a la portería. Y no le acompleja reconocerlo como explica en su perfil de LinkedIn, donde explica que esta lesión, crónica, a los 35 años, le “ha abierto los ojos” y le ha anunciado “la necesidad de formarme y reciclarme” que es lo que hace, en estos seis meses en la escuela de entrenadores.