El Bayern de Múnich se ha metido en la final de la Copa de Alemania tras imponerse (6-1) al Wolfsburgo, acercándose al ansiado triplete que buscan los bávaros esta temporada, con la Bundesliga ya en el bolsillo y a la espera de las semifinales de la Liga de Campeones, que disputarán ante el FC Barcelona.

El conjunto de Jupp Heynckes, intratable con tan solo tres derrotas esta temporada, saltó al Allianz Arena con muchos de sus titulares habituales sobre el césped, faltando Alaba por lesión y Ribéry por sanción, mostrando las ganas de alcanzar la final. El Wolfsburgo, por su parte, no se reservó nada, conscientes de que es la única vía por la que pueden acceder a la Europa League la próxima temporada, dada su mala situación en la Bundesliga.

Enseguida hacía ver su superioridad el Bayern de Múnich, y pasado el primer cuarto de hora metía un balón Robben en el área con la derecha para que Mandzukic fusilase a Benaglio e hiciese el primero. A los 35 minutos era Robben el que marcaba, asistido esta vez por Shaqiri que había robado el balón, ampliando la distancia. Al borde del descanso acortaba distancias el exatlético Diego con un golazo desde fuera del área, cruzando el balón y haciendo inútil la estirada de Neuer.

Si el gol de Diego podía parecer psicológico por el minuto en el que llegó, el efecto fue precisamente el contrario. Nada más empezar la segunda mitad, Shaqiri recibió en la frontal del área y sacó un zurdazo raso, imposible para Benaglio. A falta de diez minutos empujaba Mario Gómez una contra llevada por Shaqiri, el más destacado en este partido.

En los últimos minutos consiguió el 'hat-trick' Mario Gómez, que había entrado al campo en el minuto 77, con dos nuevos goles, ambos a pase de Schweinsteiger, sellando así el billete que les daba el pase a la final, donde tendrán la oportunidad de hacerse con un título que se les resistió el año pasado en el último partido ante el Borussia Dortmund.