'El Salto' abandona 'Al Rojo Vivo' ante el escándalo de las cloacas de Ferreras
El medio de comunicación digital 'El Salto' ha comunicado su intención de que su responsable de Economía, Yago Álvarez, deje de acudir a la tertulia de Antonio Ferreras en 'La Sexta' tras conocerse el escándalo de las cloacas periodísticas.
Publicidad
Madrid, Actualizado:
Yago Álvarez, coordinador de Economía de El Salto, no volverá a participar en las tertulias de Al Rojo Vivo tras conocerse los audios en los que Antonio Ferreras, responsable de La Sexta, reconoce al excomisario Villarejo que difundirá una noticia del medio de Eduardo Inda a pesar de saber que era un bulo sobre presuntos paraísos fiscales del entonces líder de Podemos, Pablo Iglesias.
Publicidad
Según la información difundida en su propio digital y también a través de las redes sociales, la decisión de El Salto responde a "que los audios revelan la dimensión periodística de las cloacas organizadas por Villarejo, asentadas por Inda y, hoy sabemos, expandidas por Ferreras."
En el mismo comunicado, el medio digital explica que "en El Salto aun nos indigna la posibilidad de que se publiquen fake news con conciencia de que lo son, que no se rectifique, que no se pida perdón y que se mantenga como colaborador al emisor de esos bulos, Eduardo Inda". Aclara también que "no queremos ser partícipes de eso".
La visibilidad de las tertulias
La dirección de este medio reconoce también la visibilidad y proyección que una tertulia como la de Ferreras aporta al periodista y al periódico que representa. Sin embargo, "ha pesado más el convencimiento de que no creemos posible participar en Al Rojo Vivo con la conciencia de cómo aborda la relación entre periodismo, economía y política".
Publicidad
Además, El Salto también pone de manifiesto que la decisión de abandonar el programa de Ferreras tendrá consecuencias. Así, explica que "nos cuesta abandonar espacios donde ya no se va a escuchar el mensaje y enfoque crítico de El Salto y dejar esos espacios y sus audiencias a merced de falsos economistas de izquierda o a la mayoría de analistas económicos de derechas".