Las clásicas quinielas previas a la concesión del Premio Planeta apuntan en esta 59ª edición al autor Eduardo Mendonza, que se impondría con una novela ambientada en el Madrid de 1936, en los momentos previos al estallido de la Guerra Civil. La novela, en la que aparecen figuras históricas como José Antonio Primo de Rivera, supone la primera salida de Mendoza de su tierra natal, Barcelona, ciudad que protagonizó una de sus obras cumbre, La ciudad de los prodigios.

En caso de que el premio cayese finalmente en sus manos el galardón recuperaría el prestigio perdido en otras ediciones, en las que ha primado la relevancia del premiado sobre la calidad de los textos.

Mendoza publicó el año pasado un 'librito' de relatos: Tres vidas de santos (La ballena, El final de Dubslav y El malentendido). Su última novela la publicó en 2006 (Mauricio o las elecciones primarias) y su trayectoria está jalonada de obras cumbres de la narrativa en español de las últimas décadas: La verdad sobre el caso Savolta, La ciudad de los prodigios o las descacharrante Sin noticias de Gurb -y de la que precisamente ahora se cumple su 20º aniversario- son sólo tres de ellas.

Como finalista gana fuerza la valenciana Carmen Amoraga, que con Para que nada se pierda, obtuvo el II Premio de Novela Ateneo Joven de Sevilla y en 2007 llegó a ser finalista del Nadal por Algo tan parecido al amor.

Como finalista gana fuerza la valenciana Carmen Amoraga 

Mendoza no está solo en las apuestas. Suenan otros nombres, aunque con menos posibilidades de llevarse el botín de 601.000 euros que reporta el galardón.

Varios medios apuntan a Javier Marías, pero sería incongruente que el autor se presentase al premio literario más mediático con las declaraciones previas que al autor de Corazón tan blanco ha hecho al respecto del galardón. En su favor cuenta que su último libro publicado, la última parte de su trilogía Tu rostro mañana (Veneno sombra y adiós), data de 2007. 

También se 'oye' el nombre de Elvira Lindo. En este caso las posibilidades de que se imponga son aún menores que las de Marías: no hace ni dos semanas que la autora madrileña publicó su última novela Lo que me queda por vivir. 

No es la primera vez que Lindo aparece en las quinielas. La autora ya tuvo que desmentir el año que fuera la ganadora del premio que, finalmente, recayó en Ángeles Caso. A través de un mensaje escrito en su cuenta de Facebook explicó: 'Podría ganar el premio Planeta si: me hubiera presentado, hubiera terminado mi novela, estuviera en Barcelona, quisiera entregarme a la superpromoción que eso supone, quisiera estar tres meses fuera de casa viajando y promocionando la novela, necesitara dinero... Pero, !ooooohhhhhhh! Quiero seguir en mi casita de Nueva York escribiendo y disfrutando de la vida. Muchos besos y gracias a los que me han felicitado tan cariñosamente'.

Este año, como el anterior, suena también Javier Sierra, cuyo perfil se ajusta como un guante al de vencedor del Planeta: grandes ventas y nombre conocido.