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Los operadores no serán responsables de las descargas de los usuarios

Los países que firmen el Acuerdo Comercial contra la Piratería (ACTA) no estarán obligados a imponer responsabilidad a los proveedores

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Pese a que un grupo de eurodiputados han presentado una declaración para que no se firme el Acuerdo Comercial contra la Piratería (ACTA), el último borrador presentado apunta a que los países que lo firmen ya no estarán obligados a imponer responsabilidad subsidiaria a los proveedores de servicios de Internet (ISP) por las infracciones de derechos de autor cometidas por sus clientes, de acuerdo con el nuevo borrador filtrado del ACTA que recoge las conclusiones de la última ronda de negociaciones sobre el tratado que tuvo lugar en Washington.

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Anteriormente, los ISP podían ser responsables de las infracciones de derechos de autor llevadas a cabo por sus clientes si no actuaban con la suficiente celeridad a las solicitudes de los titulares de derechos de autor de evitar estas descargas.

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El borrador publicado por Knowledge Ecology International también obligará a los países firmantes a facilitar a las autoridades pertinentes el poder de ordenar a los ISP que desvelen a los titulares de derechos de autor las identidades de los clientes sospechosos de vulnerar material con copyright.

Los países también están obligados a proporcionar "soluciones para prevenir las infracciones y recursos que constituyan un elemento de disuasión de nuevas infracciones" y evitar "tecnologías que pueden utilizarse para facilitar una infracción generalizada".

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A los participantes también se les alienta a "promover los esfuerzos de cooperación de la comunidad empresarial" para abordar con eficacia las infracciones preservando al mismo tiempo "la competencia legítima, la libertad de expresión, un proceso justo y el derecho a la intimidad".

Hoy, un grupo de eurodiputados ha presentado un escrito, respaldado por 369 firmas, instando al Parlamento europeo a que se muestre contrario a una serie de puntos que se presentan en el ACTA. Aunque el objetivo del secreto tratado es luchar contra la piratería, propone una serie de medidas que algunos tachan de atentar contra la libertad.

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