El manos libres, recomendado
Publicidad
¿De qué enfermedades hablamos?
Publicidad
El glioma maligno es el tumor primario del cerebro (porque empieza en este órgano del cuerpo) más frecuente de todos. Afecta a entre 4 y 7 personas por cada
100.000 habitantes en España. Hay unos 4.000 casos al año. Según el otorrinolaringólogo Fernando Rodríguez, del Hospital Clínico de Madrid, "es difícil saber" si ha aumentado el número de casos de neurinoma del acústico, el otro tumor que según la ONU podrían causar los teléfonos móviles, ya que se trata de un tumor muy poco frecuente. Hay alrededor de un caso por cada 100.000 personas al año. "Es un tema recurrente del que se habla cada cierto tiempo pero, hasta ahora, no hay estudios fidedignos", señala.
¿El bluetooth implica también un posible riesgo?
Publicidad
El médico epidemiólogo Francisco Vargas descarta el bluetooth, uno de los dispositivos para hablar sin manos en el coche, como un posible factor de riesgo. "La energía que llega al conductor procedente del bluetooth es mínima, porque se va disipando. Además, el tiempo de exposición suele ser muy reducido", argumenta Vargas, miembro del Comité Científico Asesor de Radiofrecuencias y Salud, financiado por la Fundación General de la Universidad Complutense de Madrid. El epidemiólogo es taxativo: "El usuario no tiene por qué estar preocupado. Sólo se han encontrado asociaciones estadísticas, no causales", explica.
¿Qué debe hacer un paciente con tumor cerebral?
Publicidad
Los afectados por estos tumores "podrán seguir usando estos teléfonos sin ningún problema", según Alfonso Berrocal, miembro del Comité Médico Asesor de la Asociación Española de Tumores Cerebrales. En declaraciones a la agencia Europa Press, Berrocal ha subrayado que la relación detectada "no es concluyente y son necesarios muchos más estudios" que la confirmen. "La alerta advierte de que existe una posibilidad que hay que estudiar con detalle, pero de ahí a decir que es cancerígeno hay una larga distancia", afirma este experto. Berrocal, jefe de Oncología del Hospital General Universitario de Valencia, recuerda que también está considerada como cancerígena la gasolina, y se sigue empleando.