Zapatero desautoriza a Sinde en la polémica del P2P

El presidente del Gobierno se pronunció con la máxima contundencia: "Nada más lejos de la intención del Gobierno que cerrar ningún elemento en la Red. No se va a cerrar nada, ninguna web ni blog. Ha de prevalecer siempre la libertad de expresión y, si hay que aclarar algo en el anteproyecto de ley, se hará".

José Luis Rodríguez Zapatero trataba así de zanjar ayer el revuelo generado ante la posibilidad de que una comisión dependiente del Ministerio de Cultura pudiera cerrar páginas web, y lo achacaba a una mala interpretación del anteproyecto de ley de Economía Sostenible. "Si se ha interpretado como un cierre de espacios en la Red, ya digo de antemano que no, bajo ningún concepto. Aclararemos lo que haya que aclarar", aseguró, durante una rueda de prensa conjunta con el presidente del Parlamento Europeo.

Hechas estas puntualizaciones, el presidente defendió la necesidad de hacer compatible la defensa de la libertad de expresión con la protección de la propiedad intelectual. Así, subrayó que aquélla "no nos aleja, ni nos puede permitir escudarnos" en relegar la cuestión pendiente de la protección de la creadores, un debate que según recordó también se suscita en otros países. "Un país que quiera tener creación intelectual, debe proteger la propiedad intelectual", sostuvo Zapatero, que concluyó: "Tendremos que encontrar la fórmula". Al acabar la rueda de prensa, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega aseguró a los periodistas: "Siempre ha habido tutela judicial y siempre la va a haber".

Cultura ha defendido el bloqueo de páginas que se alojan en el extranjero

La polémica de la intervención de los jueces, o mejor dicho, su ausencia, surgió el pasado martes, cuando se filtró el plan de la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, de crear una Comisión de Propiedad Intelectual dentro de su Ministerio capaz de cerrar una web que violara la propiedad intelectual sin intervención judicial. La polémica incendió Internet. Para intentar sofocar el problema, González-Sinde convocó a 13 de los periodistas y blogueros más conocidos de la Red española a una reunión en el ministerio, ayer por la mañana. Pero sólo consiguió generar nuevas llamas.

Los responsables del Ministerio presentes en la reunión sostuvieron, ante las quejas de los internautas, que la disposición se iba a mantener. El director general de Política e Industrias Culturales, Guillermo Corral, llegó a afirmar que no sólo se cerrarían los sitios que, a criterio de la comisión, vulnerasen la propiedad intelectual en España sino que, en el caso de que las páginas se encontraran en otro país, se daría la instrucción a las operadoras de impedir a los internautas españoles que pudieran acceder a ellas. Ésta es una medida inédita en Occidente. Sólo Corea y Australia bloquean el acceso a determinadas páginas, siempre relacionadas con pederastia. En Alemania, el presidente se ha negado a firmar la ley, porque los expertos consideran que puede ser anticonstitucional.

Los internautas salieron de la reunión enfadados y decepcionados, y así lo expresaron en sus páginas web. La indignación de los blogueros, transmitida en directo a Internet desde la misma reunión a través de la web de mensajes Twitter, sólo hizo que la revuelta de los internautas, lejos de decrecer, se reavivara. De nada valió que los representantes del Ministerio de Cultura se comprometieran a mantener nuevas reuniones después de Navidad. "Para entonces, muchos de los trámites ya estarán hechos", alertó el profesor Enrique Dans.

"Ha de prevalecer siempre la libertad de expresión", dijo el presidente

La rebelión en Internet ha provocado que se produjera una reunión en Moncloa entre miembros del Gobierno y destacados líderes del PSOE y del grupo parlamentario socialista. Varios de ellos ya habían manifestado en los últimos días su malestar por no haber sido consultados ante una medida como ésta, y su oposición a que el texto de la disposición se aprobara tal y como estaba redactado.

Poco después de esa reunión, llegaba la primera desautorización a Sinde: el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, dijo que el cierre de páginas deberá contar siempre con un control judicial. Las explicaciones de Zapatero terminaron de rematar el cambio de rumbo del Gobierno, aunque los internautas y blogueros que acudieron a la reunión con Cultura han manifestado, tras las declaraciones del presidente, su voluntad de seguir luchando hasta que la medida sea retirada .

Ángeles González-Sinde, por su parte, excusó su ausencia en la tertulia nocturna del programa Hora 25 de la Cadena Ser, al que tenía previsto acudir. Ningún portavoz de su Ministerio atendió las llamadas de este diario.

Los internautas han convocado una manifestación a través de la Red para protestar por el resultado de la reunión mantenidacon la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, sobre el cierre de webs que atenten contra los derechos de propiedad intelectual.

El encuentro con titular de Cultura, transmitido en directo vía Twitter, ha generado una avalancha de Tweets, bajo la marcas "manifiesto' y 'manifestación' y también de varios grupos de protesta en Facebook, que ha derivado en la convocatoria de movilizaciones para mañana viernes en varias ciudades españolas, como Madrid, Valencia y Barcelona. En Madrid, los internautas protestarán frente al Ministerio de Cultura.

En esta misma línea, el presidente de la Asociación de Internautas, Víctor Domingo, señaló hoy que desde su asociación planean establecer un "calendario de acciones y una estrategia dentro de la red" y anunció que no descartan "convocar actos en la calle", según explicó a Europa Press.

"Las manifestaciones de mañana serán las primeras pero no van a ser las últimas", advirtió Víctor Domingo, quien también espera mantener reuniones con los distintos grupos parlamentarios para que "echen atrás" el anteproyecto de Ley de Economía Sostenible.

"Como no es la primera vez que sucede, la red está con la mosca detrás de la oreja. Y se debe de establecer una seguridad de que esto no a va seguir asi todos los días", concluyó Víctor Domingo.