Los vecinos ofrecen balcones con vistas al circuito por 20.000 € para el Gran Premio de Europa
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Los vecinos de los edificios de las calles de Valencia desde las que se ve el circuito urbano del Gran Premio de Europa de Fórmula Uno ofrecen el alquiler de sus balcones por cantidades que alcanzan los 20.000 euros para los tres días de los que consta la prueba.
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En internet abundan las ofertas de balcones, pisos y terrazas que se alquilan tan sólo para los días 22, 23 y 24 de agosto, pero también de inmuebles en otros puntos de la ciudad.
También hay ofertas en municipios cercanos a la ciudad, en casas cuyos propietarios han visto en los aficionados a la Fórmula Uno un mercado idóneo para arrendar sus pisos a precios elevados ante la escasez de plazas hoteleras durante esos días, ya que la ocupación en la Comunitat estará próxima al cien por cien.
Por un balcón en el que, según su propietario, caben cómodamente hasta quince personas y que está situado en un noveno piso de un edificio de la prolongación del Paseo de la Alameda el dueño pide 20.000 euros por los tres días del Gran Premio aunque, advierte, en el precio está incluido el "catering".
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La oferta, a pesar del precio, tiene más de un demandante, según asegura el dueño del inmueble pues la cantidad de 20.000 euros atiende a la situación de este mercado esporádico que ha surgido a raíz de la celebración de una prueba del Mundial de Fórmula Uno.
En la misma vía, se ofrece un balcón de doce metros cuadrados en un tercer piso por 15.000 euros para ver los entrenamientos libres, los oficiales y la carrera.
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Los propietarios más agraciados por las vistas al circuito son los que disponen de inmuebles en la calle J.J. Dómine y en la del Ingeniero Manuel Soto, además de en la prolongación de la Alameda, donde también algunas empresas han alquilado las terrazas de los edificios.
Los aficionados a la Fórmula Uno tienen así otra manera de disfrutar del gran premio, rodeados de lujo, a un precio mínimo de 1.900 euros más IVA por persona. Esta es la oferta de una empresa que asegura disponer de doce terrazas con capacidad para un total de 442 invitados.
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La misma empresa ofrece también la posibilidad de disfrutar de la carrera desde barcos atracados en la Marina Sur y en la dársena del Puerto de Valencia por un mínimo de 2.200 euros más IVA.
También la empresa gestora del gran premio, Valmos Sports, comercializa los amarres para embarcaciones situadas en la dársena interior y en la Marina Sur del Puerto a precios que oscilan entre los 2.840 euros para embarcaciones de diez metros de eslora y los 9.090 euros que piden para los de treinta metros.
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Valmos Sports ya ha concertado reservas para el veinticinco por ciento de los espacios que gestiona en los que se podrá dar cabida a un total de 584 embarcaciones que llegarán a Valencia para seguir en directo el primer paso de la Fórmula Uno por la ciudad.
Sin embargo, no sólo tener vistas al circuito permite a los dueños de los pisos alquilar sus propiedades a un precio elevado, sino que también se ofrecen inmuebles en otros puntos de la ciudad para los aficionados que llegan a Valencia con entradas para el Gran Premio de Europa.
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Inmuebles en la pedanía de El Palmar, en la zona del ensanche de la ciudad o en una urbanización de Torrent (Valencia) aparecen en internet a precios que van desde los 1.500 hasta los 6.000 euros por la semana de la carrera.
Hay anuncios de pisos que se limitan a los tres días del gran premio y por los que piden cantidades en torno a los 1.500 euros como es el caso de uno ubicado junto al Palau de la Música de Valencia.
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El alquiler a asistentes a un acontecimiento deportivo o cultural es un negocio rentable que ya cuenta con profesionales, pues para el fin de semana de Fórmula Uno se ofertan pisos y casas en Cheste, donde ya es habitual alquilar viviendas para los aficionados durante el Gran Premio de la Comunitat Valenciana que se disputa en otoño.
La disputa de la prueba valenciana de Fórmula Uno en agosto ha provocado también que se ofrezca el alquiler de viviendas para todo el mes aunque no se encuentren en zonas tradicionalmente turísticas.