La última Semana Santa de Franco
Melilla retirará en pocos días la última estatua del dictador que aún permanece en la vía pública española
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El último vestigio de la dictadura franquista en las calles de España tiene los días contados. Melilla retirará tras Semana Santa la única estatua de Franco que queda en una vía pública en todo el país, según han informado fuentes del Ejecutivo autonómico.
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El compromiso del Gobierno melillense, ha hecho público durante el transcurso de una sesión plenaria en el mes de septiembre, fue la de quitar la figura de Franco, ubicada a la entrada del puerto de la ciudad, cuando se iniciaran las obras en el lienzo de la muralla, a cuyos pies se ubica.
Las obras, según han indicado las fuentes, tendrían que haber empezado el pasado día 4, aunque comenzarán, posiblemente, tras la Semana Santa, por lo que la retirada de la estatua, tras el inicio de los trabajos, será inminente.
Una vez eliminada la figura ecuestre del dictador de Santander el pasado mes de diciembre, Melilla se quedó como el único lugar de España que contaba con un monumento con la imagen del general en la calle.
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El monumento de Francisco Franco ha suscitado varias polémicas en la ciudad autónoma en los últimos años, la última hace más de tres, cuando el Gobierno local lo retiró de su lugar habitual para realizar unas obras de saneamiento, aunque siete días después volvió a ser colocado en otra ubicación cercana.
En esta ocasión, de acuerdo a lo que establece la Ley de Memoria Histórica, se aprovechará también unas obras, subvencionadas con el Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL), para trasladarla, previsiblemente al Museo Militar.
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La estatua que todavía existe en Melilla, no sólo es la única que queda sin retirar, sino que, además, es una de las pocas que fue colocada ya en democracia, en concreto en 1977, durante el Gobierno de la UCD.
Otra peculiaridad de la misma es que la efigie, en la que Franco aparece de pie, con uniforme militar, prismáticos y bastón, no está dedicada al dictador, sino al comandante de La Legión que en 1921 salvó a la ciudad del sitio en el que se encontraba.
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A la escultura la acompañan tres placas, una con un escudo franquista, otra con un escudo de la ciudad y otra con la inscripción "Al Comandante de la Legión D. Francisco Franco Bahamonde 1921-1977".
Desde la oposición de la Ciudad se ha valorado la retira de la estatua, hecho que se ha solicitado en numerosas ocasiones, sobre todo por parte de Coalición por Melilla (CPM).
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Su secretario de Organización, Hassan Mohatar, ha dicho que "ya era hora" de que este hecho se vaya a producir en los próximos días y ha deseado de que sea "con luz y taquígrafo, a la luz del día".
"Todo lo que sean vestigios del pasado y que traigan malos recuerdos, bienvenido sea que se retiren, que se olviden y que se entierren", ha afirmado Mohatar.