Los límites a las emisiones de dióxido de carbono de los coches nuevos deben revisarse y posiblemente endurecerse porque no son lo bastante ambiciosos, según afirmó el viernes la candidata a comisaria del Clima de la UE.

Los 27 países del grupo han marcado a los fabricantes un objetivo de reducir las emisiones de los vehículos nuevos en un 15 por ciento para 2015, tras una larga batalla que enfrentó a los ecologistas con las naciones que fabrican coches, especialmente Francia, Alemania e Italia.

"Pude ser importante intentar revisar si fuimos lo bastante lejos en su momento. Porque es un campo en el que la tecnología se está moviendo muy deprisa", dijo Connie Hedegaard, a un grupo de parlamentarios europeos que evaluaba sus aptitudes para el trabajo de dirigir las políticas climáticas de la UE.

"Hemos visto a menudo que la industria protesta y dice que va a ser extremadamente difícil, que de hecho es casi imposible", comentó la `política danesa. "Pero entonces resulta que cuando hacemos estas cosas, con frecuencia podemos hacerlo más deprisa de lo que se pensaba antes, y se decía antes, y pueden hacerlo de forma incluso más ambiciosa", afirmó.

Hedegaard aseguró que si el Parlamento aprueba su candidatura al puesto cuando vote el 26 de enero, ella presionará para endurecer los límites a las emisiones del transporte terrestre.

"Aún no hemos hecho lo que debería hacer la UE sobre camiones. Habrá una iniciativa sobre camiones, eso será una de las primeras cosas", añadió.

No está claro si se refería a las propuestas ya existentes en el grupo para mejorar en un 10 por ciento la eficiencia de combustible de furgonetas y camiones ligeros para 2016 o sobre si aspira a endurecer los límites para vehículos pesados.