Tropas extranjeras mataron anoche a nueve soldados afganos en un ataque aéreo erróneo en el sureste del país, dijo el miércoles el Ministerio de Defensa afgano.

El Ejército de Estados Unidos confirmó que soldados afganos podrían haber muerto y resultado heridos en un caso de identidad equivocada, pero dijo que no tenía cifra de víctimas.

Decenas de civiles afganos han muerto en ataques aéreos realizados por tropas internacionales en Afganistán este año, según responsables afganos, lo que ha avivado la percepción de que las fuerzas de la coalición estadounidense y lideradas por la OTAN no toman las suficientes precauciones cuando llevan a cabo una intervención aérea.

Sin embargo, son raros los ataques de las tropas extranjeras contra sus aliados en las fuerzas de seguridad afganas.

Helicópteros armados bombardearon un puesto del Ejército afgano en una carretera en el distrito de Dowa Manda en la provincia de Khost, un bastión talibán, dijo el jefe de distrito Lutfullah Babakarkheil. Ocho soldados murieron y cuatro resultaron heridos, declaró.

El Ministerio de Defensa afgano en Kabul situó el número de efectivos muertos en nueve.

"Nueve han sido martirizados, tres heridos, uno de ellos críticamente, en el ataque de fuerzas internacionales", dijo el portavoz del Ministerio, Zaher Azimi, que no quiso dar más detalles.

El Ministerio de Defensa condenó el ataque, añadiendo que este tipo de incidentes debilitaría el espíritu del Ejército afgano y tendría un efecto negativo sobre la fuerza, entrenada mayoritariamente por tropas estadounidenses.

La coalición liderada por Estados Unidos dijo que sus tropas "podrían haber matado y herido por error" a soldados del Ejército Nacional Afgano tras ser atacados mientras volvían de una operación.

"Informaciones iniciales de tropas sobre el terreno indican que se pudo deber a un caso de identidad equivocada por ambas partes", declaró el Ejército en un comunicado.

La violencia en Afganistán ha alcanzado su peor nivel este año desde que las fuerzas afganas y lideradas por Estados Unidos derrocaran al Gobierno talibán a finales de 2001 por negarse a entregar a los líderes de Al Qaeda responsables de los atentados del 11 de septiembre contra Estados Unidos.