El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, mostró hoy preocupación por el repunte de la inflación de la zona del euro en octubre, después de que la entidad mantuviera los tipos de interés en el cuatro por ciento.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del consejo de gobierno del BCE, Trichet calificó de "agudo" el aumento de la tasa de inflación del 2,6 por ciento el pasado mes y consideró que es "un motivo de espacial preocupación" ya que existen presiones al alza sobre los precios a medio plazo.

Tras destacar este aumento de la inflación en 5 décimas en octubre, respecto a septiembre, el presidente del BCE consideró que existen presiones al alza sobre los precios a medio plazo por el encarecimiento del crudo, de las materias primas y de algunos alimentos.

Según el BCE, el boyante crecimiento monetario y del crédito también es un riesgo al alza para la estabilidad de precios a medio y largo plazo.

Al mismo tiempo, el presidente del BCE hizo hincapié, con más énfasis que en otras ocasiones, en que existen riesgos a la baja para el crecimiento económico de los países que comparten el euro debido a que la actual reapreciación de riesgos en los mercados financieros podría tener un impacto mayor sobre la confianza y las condiciones de financiación.

Además, el fuerte aumento del precio del petróleo y de algunas materias primas también son riesgos a la baja para el crecimiento de la zona del euro, según el BCE.

El economista jefe de Commerzbank, Joerg Kraemer, opinó que el BCE mantendrá el precio del dinero en el área euro en el cuatro por ciento hasta finales de 2008, cuando probablemente lo recortará.

Kraemer basó estos pronósticos en la previsión del BCE de que la inflación subirá los próximos meses pero se moderará a lo largo del próximo año.

El precio del barril de crudo Brent, de referencia en Europa, para entrega en diciembre cotizaba hoy a 94,4 dólares en el mercado de futuros de Londres, mientras el Texas, para EEUU, se pagaba a más 97 dólares en Nueva York.

Respecto a los mercados financieros, Trichet enfatizó que se mantiene el nivel de incertidumbre y que la entidad monetaria observará muy de cerca todos los movimientos y asegurará el buen funcionamiento del mercado de dinero, donde los bancos comerciales se prestan efectivo.

El Euribor a tres meses se situó hoy en el 4,58 por ciento y a doce meses, la referencia de la mayoría de las hipotecas en España, también en el 4,58 por ciento, un nivel muy por encima del tipo de referencia del BCE que es del cuatro por ciento, lo que indica que se mantienen las dificultades de los bancos comerciales para tomar prestado efectivo.

No obstante, las tensiones en el mercado de dinero se han reducido algo respecto a los niveles del pasado agosto cuando los tipos de interés alcanzaron valores máximos de los últimos seis años en el mercado interbancario, en el 4,8 por ciento.

El Banco de Inglaterra dejó también las tasas inalteradas en el 5,75 por ciento, el nivel más alto desde hace más de seis años.

Respecto al actual cambio del euro, que superó ayer la cota de los 1,47 dólares, Trichet sólo dijo, como es costumbre, que "los movimientos desordenados en los tipos de cambio son indeseados".

Además, el banquero francés reiteró el mensaje transmitido a China recientemente, tras la reunión de los siete países más industrializados del mundo (G-7) en Washington, donde se hizo hincapié en que las autoridades estadounidenses consideran que un dólar fuerte es positivo para EEUU.

El euro ha batido desde hace varias semanas valores máximos históricos frente al billete verde.