Tres detenidos en Barcelona y Valencia en dos operaciones antiyihadistas
Han sido acusados de tratar de radicalizar y captar combatientes a través de internet para viajar a zonas de conflicto.
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MADRID, Actualizado:
Los Mossos d'Esquadra han detenido a dos personas en Roda de Ter (Barcelona), mientras que la Policía Nacional ha arrestado a otro hombre en Benetússer (Valencia) en el marco de dos operaciones contra el terrorismo yihadista que se han iniciado en la madrugada de este miércoles.
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Los detenidos en la localidad barcelonesa son dos hombres de nacionalidad marroquí de 26 y 37 años que han sido acusados de los presuntos delitos de captar y radicalizar a personas a través de las redes sociales. Además, los investigados habrían realizado acciones de enaltecimiento del terrorismo e incitación a cometer delitos de terrorismo. La policía catalana también ha registrado tres domicilios del mismo municipio.
El detenido en la localidad valenciana de Benetússer es un hombre de 45 años que presuntamente intentó captar a través de Internet a combatientes para viajar a zonas de conflicto y colaborar con el Daesh. Según ha informado el Ministerio del Interior, el hombre, de origen marroquí y nacionalidad española, publicaba en la red, de forma reiterada, mensajes sobre adiestramiento en tácticas de combate, utilizaba distintos perfiles virtuales y ensalzaba los atentados terroristas cometidos en Europa, Siria y otros países.
El arrestado, según un comunicado de Interior, es un miembro activo de la denominada "yihad de la palabra". Sus actividades, asegura el Ministerio, "le habían convertido en una amenaza real contra la seguridad pública" al emplear las redes sociales para llevar a cabo "un efectivo adoctrinamiento terrorista, fundamentado en la difusión de contenidos violentos, inicialmente en favor de Al Qaeda y, en la actualidad, del grupo terrorista Daesh". El presunto yihadista se encontraba muy integrado en la comunidad musulmana de su localidad de residencia, según los investigadores, aunque desarrollaba las labores de adoctrinamiento y captación a través de Internet.
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Durante la investigación, los agentes fueron constatando todas las fases del proceso de radicalización, como la exaltación del victimismo con difusión de contenidos sobre supuestos padecimientos de la población musulmana, mensajes de odio hacia la sociedad occidental y la búsqueda de la solución en "la auténtica fe". En esta última fase instaba a sus seguidores "al cumplimiento estricto de los dictados religiosos" y al activismo, alentando a la comisión de atentados terroristas y ensalzando los llevados a cabo por Daesh como ejemplo a seguir, detalla el comunicado.