La subida de la morosidad debilita Caja Madrid

Los bancos y cajas españoles han llegado más tarde que el resto a la crisis, pero ya han llegado. Y, en algunos casos, se han metido de lleno por el aumento de la morosidad.

Caja Madrid es uno de los que han empezado a mostrar síntomas de debilidad. Las cifras publicadas ayer demuestran que en el primer trimestre elevó sustancialmente la tasa de morosidad (del 1,36% de marzo de 2008 al 5,57%), al tiempo que redujo fuertemente su nivel de solvencia (del 11,8% al 9,6%) y la cobertura de morosos (del 161,5% al 40,5%). La caja sigue cumpliendo d las exigencias de solvencia del Banco de España pero se acerca rápidamente al mínimo del 8%. Y, sobre todo, su nivel de cobertura es, según los datos publicados hasta ahora, el más bajo del sistema español.

Sin embargo, fuentes de la caja se mostraron satisfechos con el nivel de capital, porque tienen capacidad de fortalecerlo cuando vean la oportunidad; y con la cobertura porque, dicen, es suficiente para hacer frente a los pocos créditos morosos que finalmente se convertirán en fallidos. Además, destacaron que el crecimiento de la morosidad se ha moderado a partir de febrero. En línea con esta progresión, el director general de la patronal de cajas, José Antonio Olavarrieta, desveló que la mora del sector de cajas se redujo en marzo del 4,85% al 4,65%.

Pese al deterioro de sus ratios, Caja Madrid sorprendió con un aumento del 1,1% en sus beneficios, que se elevaron a 357,4 millones de euros, gracias a la bajada del precio del dinero, que tiene inicialmente un efecto positivo en las cuentas porque llega antes a los depósitos que a los créditos.

En Caja Madrid se mostraron de acuerdo con el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, en que es necesario reestructurar el sector financiero español y cerrar sucursales, pero no seguirán su consejo. Su intención es abrir más. Ordóñez recomendó ayer en el Encuentro Financiero, organizado por Deloitte y ABC, que haya acuerdos entre entidades y fusiones, "pero no dirigidas", y aseguró que si aun así no es suficiente, habrá ayudas para el que lo necesite.

Ordóñez reveló que la vicepresidenta económica, Elena Salgado, le ha confirmado que está diseñando un fondo para gestionar la reestructuración del sistema. Lo que no se incluirá en el primer paquete de medidas que se está preparando son cambios jurídicos en las cajas de ahorros, porque "requiere undebate tranquilo y separado", dijo Ordóñez.

En las mismas jornadas, el vicepresidente de Banco Santander, Alfredo Sáenz, auguró que se reducirá el número de entidades financieras y de oficinas en España por la crisis. Su mayor preocupación es, en todo caso, la ayuda sin apenas condiciones que están recibiendo sus competidores europeos.

"Los gobiernos han hecho regalos a sus bancos y les han dado liquidez y capital más o menos gratis", denunció Sáenz, tras exigir que no se salve a ningún banco con problemas sin exigirle una reestructuración y tras pedir al BCE que preste fondos a más largo plazo.