Una obra de la serie de nenúfares del francés Claude Monet titulada "Le bassin aux nymphéas" es la estrella de la subasta de arte impresionista y moderno que organiza Christie's, de Londres, el próximo 24 de junio.

La obra de Monet forma parte de la colección del industrial estadounidense J. Irwin Miller, y su esposa Xenia Simons Miler, una pareja de mecenas y coleccionistas que han contribuido a convertir a Columbus (Indiana) en un escaparate de arquitectura moderna.

Christie's espera que ese cuadro del impresionista francés, uno de una serie de cuatro que pintó y firmó el artista en 1919, se venda en una cantidad que podría oscilar entre los 23 y los 30 millones de euros.

A diferencia de la mayoría de las obras tardías del artista que quedaron inconclusas en su estudio a su muerte, Monet vendió las cuatro, y una de ellas figura actualmente en el Metropolitan Museum of Art, de Nueva York, y otra, subastada también por Christie's en 1992, está actualmente en manos privadas.

Otras obras de la colección del matrimonio Miller que se ofrecen al mejor postor son un bodegón cubista de Pablo Picasso titulado "La Carafe" (1912-13), con un precio estimado entre 2,52 y 3,8 millones de euros, y un retrato fauve de Henri Matisse, que se expuso en la retrospectiva del artista en el MOMA neoyorquino en 1992.

En la misma jornada salen a subasta también, procedentes de otras colecciones privadas europeas o americanas, una temprana marina pointillista que pintó Paul Signac en el momento de su más estrecha interacción con su amigo y colega Georges Seurat.

También se subastan un paisaje temprano de Paul Cézanne titulado "Le village des pêcheurs à l'Estaque" (hacia 1870), un boceto al óleo de Henri de Toulouse-Lautrec que muestra un baile de máscaras en el "Elysée-Montmartre" y un cuadro de bailarinas, "Danseuses à la barre", de Edgar Degas.

De Alberto Gicometti se ofrece un retrato de Isaku Yanaihara, profesor de filosofía japonés que tradujo "El extranjero", de Camus, al idioma de su país y que viajó a Francia en 1954 para conocer personalmente a los más destacados exponentes del existencialismo.

Fue el filósofo francés Jean Paul Sartre quien presentó a Yanaihara a Giacometti en el famoso "Café des Deux Magots" parisino, y el japonés se convirtió en uno de los modelos preferidos de Giacometti fuera de sus modelos familiares como su hermano Diego.