Macarena Gómez es Bárbara, una psicópata con la mente de Hannibal Lecter y el fondo de armario de Paris Hilton que siembra el caos en "Sexykiller", una comedia de terror dirigida por el realizador español Miguel Martí, que vuelve a la cartelera después de "Slam" y de "Fin de curso".

"Ésta es una película dirigida a un público mucho más amplio que las dos anteriores", afirma en una entrevista con Efe el director, que hace varios guiños a clásicos del cine de terror en algunas escenas de "Sexykiller", que se estrena este viernes.

Quentin Tarantino, Robert Rodríguez y Edward Wright son tres de los realizadores a los que rinde tributo Martí, quien destaca "Zombies Party" como una de sus películas preferidas y asegura haber hecho estos homenajes "para que la gente que supiera de cine le sacara un poco más de juguillo" al filme.

La cinta narra una serie de asesinatos que están sucediendo en el campus de la universidad de Medicina y sobre los que la policía no consigue ninguna pista.

Durante la historia, nadie sospecha de Bárbara (Macarena Gómez), una estudiante obsesionada con el mundo de la moda y las revistas, una especie de Barbie que "mata para quitarse de en medio todo lo que le resulta molesto", declara la artista.

"Nunca he hecho de chica mona en el cine y me apetecía ponerme modelos ideales", señala Macarena, coleccionista de muñecas Barbie en su vida real, que comparte cartel en "Sexykiller" con Alejo Sauras, Ángel de Andrés, César Camino y Ramón Langa, entre otros.

"Alejo es un profesional que aporta mucho a la trama", apunta Miguel Martí, quien destaca que el actor sale en la película de su papel de galán con las chicas para interpretar al amigo gay del protagonista.

Ese protagonista es César Camino, casi un desconocido en las pantallas, que "había hecho televisión y algo de cine con 'La Fiesta'", cuenta el director, que resalta del intérprete su "papel potente y su complicidad con el espectador".

Bárbara, la psicópata que convierte a sus compañeros de facultad en "víctimas de la moda", es para Macarena "un personaje que empieza siendo una villana y termina siendo una heroína".

"Yo a Bárbara me la llevaría de cañas conmigo misma", bromea la actriz, que no ha tenido que "documentarse" para captar los guiños de Martí a otras películas porque se considera "una consumidora habitual de este género".

Bárbara es, en ocasiones, "superchunga" para el director, sobre todo en algunos de sus asesinatos, aunque Martí también apunta que "en otras ocasiones te dan ganas de meterte en la cama con ella". Quizá por eso Macarena Gómez afirma que no le importaría convertirse, después de esto, "en una musa del cine de terror".