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Unos senadores checos presentan un recurso contra Lisboa

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Un grupo de 17 senadores checos presentó el martes un recurso de inconstitucionalidad contra el Tratado de Lisboa, lo que da al presidente del país, el euroescéptico Vaclav Klaus, tiempo extra para paralizar la ratificación del tratado y su entrada en vigor.

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Klaus ha dicho que esperará a que el Tribunal Constitucional dictamine sobre cualquier recurso al tratado antes de firmar el texto, que pretende reformar la Unión Europea agilizando la toma de decisiones entre los 27 estados miembros.

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que ya fue aprobado por el Parlamento - podría tardar meses en tomar una decisión.

Los 17 senadores son en su mayoría miembros del ala euroescéptica del derechista Partido Demócrata Cívico, fundado por Klaus.

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"El principal punto es la cuestión del conflicto (del tratado) con la soberanía checa", dijo Jiri Oberfalzer, uno de los senadores, tras presentar el recurso de 60 páginas.

El portavoz de Klaus no estuvo disponible de manera inmediata para hacer declaraciones.

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Este nuevo reto llega dos días antes del referéndum que se va a celebrar en Irlanda sobre el tratado elaborado en 2007 y cuando los dirigentes europeos se mostraban más optimistas acerca de su posible ratificación, tras varios reveses.

Muchos creen que un "sí" en Irlanda añadiría presión a Klaus y al otro presidente que no lo ha firmado, el polaco y también euroescéptico Lech Kaczynski, pero si aguantan hasta las elecciones británicas previstas para junio del año que viene, el tratado podría verse en peligro.

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David Cameron, el líder de los conservadores británicos, que están en la oposición, encabeza los sondeos con una cómoda diferencia y ha escrito a Klaus confirmando su intención de celebrar un referéndum sobre el Tratado de Lisboa si llega al poder y el texto no está en vigor. Los votantes británicos probablemente optarían por el "no", aunque el actual Gobierno laborista lo ha ratificado.

El tratado necesita el apoyo unánime de los 27 estados miembros para entrar en vigor. Irlanda, que estuvo a punto de provocar una crisis tras el "no" en otro referéndum el año pasado, parece dirigida esta vez hacia el "sí", aunque sigue habiendo muchos indecisos.

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