Público
Público

Ríos refleja las múltiples aristas del mito Diana de Gales en su nueva novela

EFE

La muerte en París de Diana de Gales, uno de los principales iconos del siglo XX, es el desencadenante de la nueva novela del escritor Julián Ríos, "Puente de Alma", en la que refleja las múltiples aristas de este personaje, cuyo trágico final contribuyó a agrandar el mito en que se ha convertido.

"No existe mito si no hay detrás una muerte polémica o misteriosa", como fue la de la Princesa Diana, el 31 de agosto del 97, cuando el Mercedes negro en el que viajaba junto con su amigo Dodi Al Fayet se empotró en el muro del túnel de Alma y acabó con la vida de esta mujer que "encarna todas las contradicciones de la sociedad moderna", afirmaba hoy en una entrevista con Efe Julián Ríos.

Este escritor al que Juan Goytisolo define como "alquimista del verbo" y Carlos Fuentes considera el más inventivo y creativo de la lengua española, vive en París desde principios de los 90 y, tras la muerte de Diana, pasaba con frecuencia por el túnel y, al salir, veía "todo ese gentío arremolinado alrededor de la llama dorada del puente, que por múltiples razones se ha transformado en el monumento funerario de la Princesa".

Ríos (Vigo, 1941) empezó a interesarse por esas personas de múltiples nacionalidades que sentían pasión por la figura de Lady Di. Con el paso del tiempo, se dio cuenta de que había asistido al "nacimiento de un mito moderno" y que podía darle pie a reflexionar sobre las obsesiones del ser humano, la conspiración y la muerte en una novela.

Publicada por Círculo de Lectores-Galaxia Gutenberg, "Puente de Alma" es, según su autor, "la primera novela en cualquier idioma que sale sobre la muerte de Diana, aunque hay otras noveluchas de tipo rosa", pero no de la envergadura literaria de ésta.

No en vano, Julián Ríos es autor de títulos destacados de la literatura del siglo XX, como "Larva", esa novela que, según Goytisolo, "dinamita el código usual del relato"; "Poundemonium", "Monstruario", "La vida sexual de las palabras" o "Cortejo de sombras".

Pero la muerte de Diana Spencer, esa "princesa compasiva con los sufrientes, esa madre Teresa de Calcuta de tacón alto, y que, según otros, era una manipuladora, una histérica, una víctima de la Casa Real inglesa", es en realidad un mero pretexto para que el autor construya una compleja novela de "personajes curiosos e interesantes" en "Puente de Alma", y convierta a la muerte y sus misterios en uno de los ejes centrales del libro.

"Diana es el desencadenante, es la luz alrededor de la cual giran como polillas todos los personajes de esta novela tragicómica", que cuenta las teorías más inverosímiles sobre la vida de la princesa, y sobre su muerte.

Porque Julián Ríos repasa en el libro todas las teorías conspirativas que hay sobre el trágico final de Diana y lanza incluso "alguna hipótesis nueva sobre cuál pudo ser la causa de la muerte", pero él no toma partido. Son los personajes los que lo hacen.

Un fotógrafo obsesionado con lograr imágenes únicas de Diana, un pintora frustrada y un danés budista convencido de que Louis Ferdinand Céline, el genial y polémico escritor francés, se había reencarnado en la Princesa de Gales, son algunos de los increíbles personajes de esta novela, en la que brilla con luz propia el lenguaje.

Por algo a Julián Ríos le hubiera gustado "poder hacer música con las palabras" e intenta en cada libro suyo que esas palabras "sean lo más expresivas posibles, que tengan sensualidad y sonoridad", le dice a Efe.

Dividida en ocho partes, la novela aporta múltiples detalles sobre la vida de Diana de Gales.

"Me interesaba ver cómo funcionan los mitos, cómo existencias que están fuera de nuestro común vivir pueden atraer a los comunes mortales", explica Ríos, quien en uno de los capítulos más asombrosos del libro reúne a bordo de un barco sobre el Sena a numerosos artistas e intelectuales muertos, entre ellos a Baudelaire, Braque y el astrólogo Moricand. Los tres murieron un 31 de agosto, el mismo día que Diana de Gales.

Esta novela en la que "todo está muy pensado" y "no hay cabos sueltos", encierra también "otra casualidad inmensa": Céline murió el mismo día y casi a la misma hora en que nació la Princesa Diana, un mito de la categoría de Marilyn Monroe.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias