Los resultados parciales indican un importante avance de los conservadores

Los primeros resultados de las elecciones generales celebradas el lunes en Irán indican un importante avance de la corriente conservadora en las diferentes provincias del país.

Estos resultados son sólo parciales ya que aún no ha comenzado el escrutinio en las grandes ciudades ni en la capital, Teherán.

Según fuentes del ministerio de Interior y los datos difundidos por las agencias IRNA y Fars, los tradicionalistas obtuvieron el 70 por ciento de los votos en 30 circunscripciones, mientras que los reformistas ganaron sólo el 15 por ciento.

En Jorasan del Sur, en el noreste de Irán, los tradicionalistas acapararon los cuatro escaños por esa provincia en el Parlamento, compuesto por 290 asientos, tras conseguir la mayoría de los votos.

Lo mismo ocurrió en el caso de Qom, al sur de la capital, donde los candidatos del Frente Unido de los Tradicionalistas (Osulgayan) controlaron los tres escaños por esa ciudad santa en el legislativo.

Entre estos tres figura Ali Lariyani, el ex negociador iraní en materia nuclear y ahora asesor del líder supremo de la República Islámica para asuntos atómicos, quien obtuvo el 76 por ciento de los votos.

Fuentes próximas al escrutinio indicaron que los reformistas, que participaron en las elecciones bajo dos listas diferentes, obtuvieron "algunos" escaños en las localidades donde no habían candidatos fuertes de las listas conservadoras.