En un hecho sin precedentes en la historia del Tribunal Constitucional (TC) su vicepresidente, Eugeni Gay, (sector progresista) y los magistrados Elisa Pérez Vera (progresista) y Javier Delgado (conservador) han presentado su renuncia.

La decisión se adopta con el fin de forzar la renovación del TC, que el PP lleva torpedeando desde hace más de tres años, según han confirmado a Público fuentes del organismo.

Tras las renuncias el TC se quedaría con tan sólo ocho magistrados, el mínimo legal para seguir funcionando

La renuncia debe ser aprobada por el presidente del Tribunal Constitucional, Pascual Sala, quien 'se pronunciará a la mayor brevedad' no sin antes realizar una 'evaluación de las condiciones que aseguren el más completo y correcto funcionamiento del Tribunal Constitucional', señala el organismo en un comunicado. En caso de que acepte la dimisión, el Constitucional se quedaría con tan sólo ocho magistrados, el mínimo legal -el quórum mínimo- para que pueda seguir funcionando. Quedarían cinco magistrados 'progresistas' (Pascual Sala, Luis Ignacio Ortega, Adela Asúa, Pablo Pérez Tremps y Manuel Aragón) y tres 'conservadores' (Francisco José Hernando, Francisco Pérez de los Cobos y Ramón Rodríguez-Arribas).

Gay, Delgado y Vera son los tres magistrados que deberían haber finalizado su etapa en el Constitucional en noviembre de 2010. Desde entonces permanecen en sus puesto en funciones. La Cámara baja también debería haber designado ya al sustituto de Roberto García Calvo, fallecido en 2008.

La última renovación del Constitucional se produjo en enero, con casi cuatro años de retraso, generando un profundo malestar en el seno de la institución. El Senado designó a los sustitutos de la antigua presidenta María Emilia Casas y de los magistrados Vicente Conde, Guillermo Jiménez y Jorge Rodríguez-Zapata, quienes deberían haber abandonado el tribunal en diciembre de 2007. Los partidos políticos designaron como nuevos miembros de la institución a los magistrados Luis Ignacio Ortega, Adela Asúa, Francisco José Hernando y Francisco Pérez de los Cobos.

'El PP tiene que tener una voluntad clara y creo que es lo que están pidiendo estos tres jueces', ha señalado el secretario de Organización del PSOE, Marcelino Iglesias, quien ha pedido en nombre de su partido a los conservadores que 'de una vez por todas' sea capaz de entender que 'tiene que cooperar y colaborar' para que se produzca la renovación.

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha vinculado la legalización de Bildu con la renuncia. A su juicio, 'a la situación de deriva del Gobierno se une hoy el caso en el Constitucional', ha lamentado.

Eugeni Gay (Barcelona, 1946) es un nacionalista catalán, incorporado al sector progresista. Fue nombrado el 30 de octubre de 2001 por el Congreso de los Diputados, después de que PP y PSOE consensuaran su elección en sintonía con CiU. Y tendría que haber sido sustituido por la Cámara Baja el pasado noviembre.

Elisa Pérez Vera fue nombrada a propuesta del PSOE desde 2001, con un mandato que terminó el 7 noviembre de 2010. Fue ponente de la sentencia sobre los recursos de inconstitucionalidad del Estatut hasta renunciar en abril de 2010, tras resultar rechazado por votación el quinto borrador redactado.

Javier Delgado fue nombrado magistrado del Tribunal Constitucional el 6 de noviembre de 2001. Ya ocupó este puesto entre 1995 y 1996. Fue presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial entre 1996 y 2001.

En mayo presentó un voto particular contrario a permitir la concurrencia de Bildu en las últimas elecciones municipales. También presentó voto discrepante a la sentencia sobre el Estatut y calificó la postura del resto de sus compañeros de 'radical'.