La selección española realizó su primera toma de contacto para la Eurocopa, con una jornada de convivencia en un hotel de Barajas, donde el seleccionador Luis Aragonés recibió a 21 de sus 23 convocados, por las ausencias de los madridistas Iker Casillas y Sergio Ramos.

Luis Aragonés quiso inculcar a sus jugadores la mentalidad que desea para acudir a la Eurocopa, antes de concederles una semana de vacaciones previa a la concentración.

Fue una jornada de convivencia en la que se firmaron las primas de la Eurocopa, que ya estaban acordadas, se tomaron medidas para los trajes oficiales y se planificó el trabajo que llevarán a cabo los internacionales.

Estaban citados a las 11.00 horas de la mañana, pero desde una hora antes fueron llegando los convocados, entre los que destacaron las caras nuevas de Sergio García y Santi Cazorla, el primero de ellos aún con el dolor en el gesto por el descenso vivido ayer con el Real Zaragoza.

Los últimos en llegar fueron los tres internacionales del Villarreal, Marcos Senna, Joan Capdevila y Santi Cazorla. Y las ausencias fueron Iker Casillas y Sergio Ramos.

Los dos jugadores del Real Madrid pasaron la mañana con festejos del 31 título liguero, visitando el Ayuntamiento de Madrid y la sede de la Comunidad, antes de coger el avión para viajar a Arabía Saudí, donde jugarán en Riad un partido amistoso ante el Al-Nasr.

Al resto de internacionales les recibió Luis Aragonés uno por uno, les fueron tomando medidas para los trajes oficiales y tras la comida se produjo una reunión, en la que el seleccionador marcó las líneas de su proyecto para la Eurocopa.

Se estableció la actividad para la semana de vacaciones y el trabajo planificado por los técnicos para los días de intensa preparación de la Eurocopa. Además, se avisó a los jugadores por prevención de los exigentes controles antidopaje que habrá en Austria.