El PPC deplora la pataleta de CiU y destaca que el Govern cumple sus exigencias
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El PPC ha deplorado hoy la "pataleta de niños pequeños" que han protagonizado hoy los diputados de CiU en el Congreso al no participar en la votación sobre la reforma de la Constitución, y ha asegurado que la ley de estabilidad anunciada hoy por el Govern no es nada nuevo, sino una "exigencia" del PPC.
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En un comunicado, el portavoz del PPC en el Parlament, Enric Millo, ha advertido a CiU de que su actitud "irresponsable" pone "en riesgo el futuro de España y de Cataluña por intereses partidistas".
También ha opinado que el líder de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, "dilapida ahora su trabajada imagen de hombre de Estado al alinearse con independentistas y comunistas".
Precisamente hoy, el Govern ha anunciado que se propone aprobar una ley catalana de estabilidad presupuestaria con el fin de fijar allí un límite propio para el déficit público antes de que lo hagan Las Cortes mediante ley orgánica.
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Millo ha replicado al Govern que no inventa "nada nuevo" con este anuncio, ya que "no hace nada más que cumplir con la primera exigencia del PPC para la negociación de presupuesto de 2011".
El pasado 8 de julio, el PPC dio a conocer el acuerdo por el cual facilitaba a CiU la aprobación de los presupuestos de la Generalitat para 2011.
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Entre los ocho compromisos pactados, había uno relacionado con la estabilidad presupuestaria por el cual el Govern se comprometía a "presentar un proyecto de ley de estabilidad presupuestaria de Cataluña antes de finalizar 2012".
Sin embargo, el acuerdo contemplaba flexibilidad en cuanto al cumplimiento del déficit, ya que el PPC, el Govern y el grupo de CiU pactaron que, si había desviaciones presupuestarias por la caída del PIB que llevaran a incurrir en déficit, habría un plazo, "no superior a tres años", para recuperar de nuevo la estabilidad presupuestaria.
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Además, el Govern se comprometía a ir progresivamente alcanzando "la estabilidad" en sus cuentas, "comenzando por el cumplimiento" del objetivo de déficit marcado para 2012, y a que el gasto público no creciera por encima de la evolución del PIB.