La OCDE recomienda dar alas a docentes y primar a centros con mejores resultados
Publicidad
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) recomienda dar alas a los docentes para que tengan mayor libertad y margen de maniobra en su labor con los contenidos curriculares educativos, y premiar económicamente a los centros que logren obtener un mayor valor añadido de la formación.
Publicidad
Así lo puso hoy de manifiesto en Murcia Andreas Schleicher, jefe de la División de Indicadores y Análisis de la Dirección de Educación de la OCDE, responsable del informe PISA, en una rueda de prensa celebrada antes de su intervención en unas jornadas sobre nuevas tendencias en la enseñanza de las ciencias y las ingenierías.
Schleicher avanzó que el nuevo informe trienal del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA), que se hará público en 2009, se centrará en "la evaluación mediante un ejercicio de tareas abiertas, no de tipo test, de la competencia no pasiva en el manejo de las aptitudes que genera el conocimiento, en la forma de resolver con su manejo problemas nuevos, no conocidos por alumnos de 15 años" de los 57 países participantes, 30 de ellos, de la OCDE.
Destacó los "grandes progresos" educativos realizados por España, sobre todo en la rebaja de la proporción de alumnos por aula y en la equidad, pero "ahora es el momento de darle mayor calidad a esa expansión, por el camino de la mejora de la formación del profesorado, de la profesión de enseñante: no hay fórmulas mágicas".
Publicidad
Los países con mejores resultados en el informe PISA comparten "las grandes esperanzas que ponen en sus alumnos, que no toleran el fracaso escolar, tienen las mismas expectativas con los inmigrantes que con los nativos y los docentes comparten sus experiencias fuera del aula y tienen mayor espacio para desarrollar su creatividad".
Un opositor, comentó, puede sacar muy buena nota en un examen público, pero lo que interesa es su "correcta capacidad docente, que debe ser sometida a un seguimiento y una evaluación profundas", que en algunos países se concreta en un examen cada cinco años.
Publicidad
Así, el proceso de entrenamiento del profesor después del acceso a su puesto de trabajo es fundamental, tanto en su competencia en la materia que le corresponde impartir como en su capacidad pedagógica, por lo que hay que motivarlo, darle armas, alas, proyección profesional, prestigio e incentivos para que se active una vez dentro del sistema, dado que no es un trabajador convencional.
Gráficamente, dijo que el puesto de trabajo del profesor "es una jaula dorada, porque el sueldo no está mal, pero de allí no te puedes mover una vez que estás dentro, por lo que al principio está bien, pero luego aburre y frustra si no hay mayores expectativas".
Publicidad
Al referirse a la integración de los inmigrantes, se mostró a favor de las clases de refuerzo, más rentables para el sistema que pagar su repetición de curso, sobre todo en los tres primeros años de su llegada al país, una faceta ésta del tiempo extra de refuerzo en la que España "no sobresale, precisamente", cuando en Suecia es de una cuarta parte por encima del total de horas lectivas.