La jornada electoral de la que saldrá el nuevo presidente o presidenta de Costa Rica, ha transcurrido hoy en calma y con alegría en los alrededores de los centros de votación, según el Tribunal Supremo de Elecciones y los observadores de la OEA.

El presidente del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), Luis Antonio Sobrado, declaró hoy en una conferencia de prensa que a la mitad de la jornada, que va de las 06.00 a las 18.00 hora local (12.00 a 24.00 GMT), se percibe un ambiente de tranquilidad.

"Ratificamos que las votaciones transcurren de manera adecuada en un ambiente de tranquilidad nacional, en donde todos los costarricenses están ejerciendo su sufragio sin dificultades", aseguró Sobrado.

Añadió que en los comicios los costarricenses están ratificando su "vocación democrática" y su "apuesta por una transición ordenada y democrática de las autoridades de Gobierno", e hizo un llamado para que los votantes acudan a las urnas.

Datos del TSE indican que hasta el momento no se ha registrado ninguna anomalía que violente la libertad ciudadana a ejercer su derecho al voto.

Por su parte, la ex canciller de Colombia y jefa de la Misión de Observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), María Emma Mejía, afirmó en una conferencia de prensa que el proceso ha sido "muy alegre y supremamente cívico".

"Costa Rica tiene mucho que aportar a los procesos democráticos porque es el único de nuestros países que durante 60 años ha venido entregando el mando (presidencial) cada cuatro años", afirmó Mejía.

La observadora aseguró que "es de resaltar que no hay un solo incidente que lamentar" y explicó que los 52 observadores de la OEA han comprobado la tranquilidad con la que transcurren los comicios en las siete provincias del país.

Además, subrayó que para varios de los observadores de la OEA el proceso electoral costarricense ha sido "impactante", porque no están acostumbrados a ver a los niños acompañar a sus padres a votar, la cantidad de banderas en las calles ni el respeto con que se tratan los rivales.

La alegría del proceso electoral también se reflejó cuando fue a votar el presidente Óscar Arias, quien fue recibido con música y decenas de seguidores en una escuela de la capital.

"Me siento orgulloso cuando veo gente con camisetas de todos los colores, de todos los partidos, abrazada, esperando el resultado al final del día como debe de ser, con respeto y dispuesta a acatar el resultado", comentó el mandatario, quien entregará el poder el próximo 8 de mayo.

Por su parte, los candidatos a la Presidencia iniciaron su día con una misa en la catedral metropolitana de San José y luego emitieron el sufragio ante multitud de seguidores que los esperaba en sus diferentes centros de votación.

Lo curioso de la jornada lo protagonizó Ottón Solís, candidato del centro-izquierdista Partido Acción Ciudadana (PAC), quien inició su día ordeñando vacas en su casa en la localidad de Pérez Zeledón, al sur de la capital.

Solís dijo en una rueda de prensa que está seguro de su triunfo en la primera ronda y se atrevió a proyectar un apoyo del 46% del electorado.

El mismo optimismo evidenció la favorita en los sondeos, Laura Chinchilla, del oficialista Partido Liberación Nacional (centro-derecha) y Otto Guevara, del derechista Movimiento Libertario, quienes también dicen que ganarán en la primera ronda.

"Siento mucha ilusión. Se han desbordado las expectativas de cariño y estoy muy agradecida" declaró Chinchilla, quien busca convertirse en la primera presidenta en la historia de Costa Rica.

Por su parte, Guevara reiteró su discurso de "hacer el cambio ya" y pidió a los electores que lo elijan para "liderar las transformaciones que Costa Rica necesita en cuatro años con más seguridad, más y mejores empleos".

El candidato ganador debe obtener un mínimo del 40% de los votos válidos para evitar tener que ir con el segundo más votado a una ronda electoral definitiva que, de ser necesaria, se celebraría el primer domingo de abril.

Otros seis candidatos de partidos minoritarios aspiran a la Presidencia.

Poco más de 2,8 millones de costarricenses están llamados a las urnas para elegir al presidente y 57 diputados a la Asamblea Legislativa para un periodo de cuatro años.