El holandés Ruud van Nistelrooy, el marfileño Didier Drogba, los técnicos José Antonio Camacho y el belga Eric Gerets, los jugadores del Olympiacos Raúl Bravo y Darko Kovacevic y el meta brasileño Dida fueron protagonistas en la conclusión de la segunda jornada de la Liga de Campeones:

- VAN NISTELROOY: Su nombre es Rutgerus Johannes Martinus van Nistelrooij, en Inglaterra se le renombró como Van the Man y le bastó una temporada en el Real Madrid para ganarse un puesto junto a los grandes artilleros de su historia. Goleador en tres países (Holanda, Inglaterra y España), Van Nistelrooy no falla en la Liga de Campeones, donde ya suma 52 goles y tiene la plusmarca de tantos en una edición 12 (2002-03). Contra el Lazio, anotó los dos tantos. El primero con la fortuna que acompaña a los grandes delanteros, el segundo con calidad para resolver ante Marco Ballotta. - DROGBA: Como Van Nistelrooy, Drogba vive del gol. Se desespera cuando no supera la meta rival y, por ese motivo, fue expulsado el pasado sábado, en el encuentro que supuso su reaparición desde que cayese lesionado en septiembre. No ha tardado mucho en recuperar la sonrisa. En Mestalla, volvió a ser el delantero decisivo, marcó el segundo gol del Chelsea y no sólo elevó la moral de su equipo, sino que llevó la desolación al Valencia, de nuevo superado por los "blues". - GERETS: Fue un defensa que hizo historia en la mejor selección belga. Llegó al Marsella la pasada semana para reflotar a un conjunto en crisis y ha dado resultado. Su victoria en Anfield, ante el subcampeón europeo, aúpa a los marselleses a un inesperado liderato del grupo A. - CAMACHO: No está siendo agradable la segunda experiencia de Camacho en el Benfica. Si su derrota en San Siro entraba dentro de los planes, perder contra el Shakhtar en Lisboa le augura críticas más duras de las que ya está sufriendo el ex seleccionador español. - RAÚL BRAVO Y KOVACEVIC. Representantes de los ex jugadores de la Liga española que se ganan la vida en otros campeonatos, ambos contribuyeron a la importante victoria a domicilio sobre el Werder Bremen, la primera que logra en 32 partidos como visitante en la Liga de Campeones el conjunto de El Pireo. Entre ambos fabricaron, además, el tercer tanto de los rojiblancos (1-3).