La muestra, que se inaugura mañana viernes día 5, tiene por objeto la reinterpretación de un movimiento artístico que hasta hoy ha estado asociado casi siempre con protagonistas masculinos. El plástico como material principal, los colores chillones, las formas reducidas, la inclusión constante de los mass media y los nítidos contornos gráficos de las obras de estas artistas borran las distancias y reivindican sus estrategias de desarrollo artístico.

Las obras de Evelyne Axell, Sister Corita, Christa Dichgans, Rosalyn Drexler, Jann Haworth, Dorothy Iannone, Kiki Kogelnik, Marisol, Niki de Saint Phalle, utilizan los mismos materiales, los mismos temas, el mismo estilo y comparten el mismo proceso creativo que sus colegas masculinos.

Tal vez, las mujeres de los años pop (Années Pop) celebran con mayor desenfado la sexualidad femenina y la libido, a modo de chicas malas o pin-ups, aderezado todo con los elementos de la cultura del consumismo más desaforado.

Porque estos trabajos pueden verse también como ácidos comentarios acerca de los efectos que tiene en la sociedad el progreso económico, a través de fragmentos de la vida cotidiana transportados a las obras incluso con un claro toque autobiográfico, en las que lo personal pasa a ser al mismo tiempo expresión de lo político.

Ellas, a su manera, fueron pioneras del feminismo, y se han mantenido siempre beligerantes y críticas. Christa Dichgans revela la superficialidad de la cultura del consumidor, exponiendo el mito de los productos del mundo occidental como una cáscara vacía. Jann Haworth transforma irónicamente objetos cotidianos en objetos kitsch de gran tamaño. Rosalyn Drexler explora los tópicos de los medios de comunicación. Al igual que Sister Corita, que en los años sesenta tomó una posición clara sobre los acontecimientos sociales y políticos que convulsionaron la década, como la guerra de Vietnam.

Todas estas artistas tienen en común el humor y una irónica ligereza en su forma de afrontar la vida, que se refleja de forma muy diversa en su manera de enfrentarse al arte contemporáneo.