La maratón para que la CEOE encuentre un presidente antes del 21 de diciembre y zanje su crisis de liderazgo puede convertirse en un sprint de pocos días. Los contactos dentro y fuera del aparato de la patronal se intensifican. Tres días después de que Gerardo Díaz Ferrán dejara vía libre para convocar unas elecciones a las que no se presentará, se suceden los movimientos internos para aupar al presidente de la patronal catalana Foment del Treball, Joan Rosell, como candidato favorito.

Aunque hay otros aspirantes. Ayer, el presidente de la patronal andaluza CEA, Santiago Herrero, fue el primero en hacer oficial su candidatura al anunciar esta agrupación que su junta directiva le da su apoyo para que se presente.

Sin embargo, por ahora, Rosell es el mejor visto por algunas de las principales confederaciones territoriales y también el que menos rechazo concita entre varias grandes asociaciones sectoriales, que se resisten a que vuelvan a mandar los barones autonómicos.

Hay otro candidato en la sombra, Jesús Banegas, presidente de la asociación de telecos, AETIC. Banegas está empezando a despertar simpatías entre algunas grandes empresas que no se sienten representadas por un candidato territorial y que ven a Rosell ahora como un nombre próximo a lasterritoriales y a Díaz Ferrán.

Mientras la carrera avanza, la patronal madrileña CEIM, sabedora de su papel crucial en este proceso, se deja querer. Esta agrupación ha vuelto a situarse más cercana a la opción de Rosell, después de que se haya descartado a sí mismo como aspirante el ex presidente de Endesa Manuel Pizarro (su candidatura estaba avalada por la presidenta madrileña, Esperanza Aguirre). Es un apoyo con cautela. 'No digo que no vayamos a apoyar a Rosell',comentó ayer a Público el presidente de la CEIM, el empresario hostelero Arturo Fernández. 'Lo que queremos es lo mejor para los empresarios madrileños, así que veremos quién ofrece las mejores ideas en su programa', dijo.

Las palabras de Fernández entroncan con la idea que se extiende por algunas grandes agrupaciones de reforzar la imagen de la CEOE demostrando que el proceso es, por primera vez, democrático. O al menos, que lo parezca. Por eso muchos se muestran a favor de que haya dos candidatos aunque uno no tenga muchas opciones. Tres podrían complicar el proceso no dejando un vencedor que dé una imagen de unidad. Por eso, no son pocos los que esperan que Herrero y Rosell pacten una candidatura conjunta.

Según fuentes internas, a las elecciones llegarán sólo dos candidatos y apuntan que 'todo estará arreglado en dos semanas'. Parte de la cúpula de la CEOE prefiere un pacto rápido para que no afloren más candidatos y evitar que todo se juegue a la carta final de los 818 votos de la asamblea del 21 de diciembre.