El ministro eleva a 52.000 millones las necesidades de la banca
La actualización se debe a que la referencia es el estado de las entidades a diciembre
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El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, elevó ayer a 52.000 millones las necesidades del sector financiero para sanear sus activos inmobiliarios. La cifra supera los 50.000 millones que había estimado inicialmente Economía. El motivo, según explicó Guindos tras la convalidación del decreto para la reforma financiera, es que ese cálculo se basó en la situación de los balances de las entidades a junio de 2011 y la referencia válida es a diciembre de 2011.
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De hecho, cuando el pasado 2 de febrero, un día antes de que el Consejo de Ministros diera luz verde al decreto, Guindos detalló las nuevas exigencias al sector, la cifra que resultaba de aplicar los nuevos coeficientes (ligados a las promociones inmobiliarias en curso, suelos y viviendas terminadas), basada todavía en los datos a junio, era superior a los 50.000 millones (rondaba los 57.000 millones). No obstante, las necesidades reales del sector no tienen tanto alcance, ya que gran parte de las provisiones y capital exigidos ya están constituidos por las entidades.
El origen de esos 52.000 millones son las nuevas provisiones, tanto específicas (unos 25.000 millones) como genéricas (unos 10.000 millones), que se exigen al sector, más un colchón de capital adicional próximo a los 15.000 millones para aumentar las coberturas sobre suelo y promociones en curso. Durante su intervención en el pleno del Congreso, Guindos explicó que el saneamiento del sector "aún no ha finalizado y permanecen dudas sobre los activos inmobiliarios" que tienen las entidades en su balance.
El ministro defendió su tesis de que las nuevas exigencias propiciarán la salida al mercado de viviendas con importantes descuentos y aseguró que la reforma ya ha dado frutos, como el que "varias entidades" hayan podido colocar emisiones de deuda en los mercados mayoristas.
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Además, destacó que el Banco Central Europeo (BCE) ha valorado las medidas, en una carta remitida anteayer y firmada por su vicepresidente, el portugués Vitor Constancio. El BCE comparte la preocupación de Economía de que se fusionen entidades débiles, ya que, según el organismo emisor, con ello se "podrían limitar los beneficios generales de la reforma". Según Guindos, con la reforma el sistema financiero español será "más eficiente, saneado y con entidades solventes" y el crédito se reactivará. El ministro admitió que cerca del 90 % de las pymes que han buscado crédito han encontrado "problemas" para lograrlo.
Ayer se conocieron las necesidades de provisiones de Novagalicia Banco, que calcula que necesitará 1.600 millones y asegura que estas necesidades adicionales de saneamiento quedarán "íntegramente cubiertas" este mismo año.