'134 años de vida no nos garantizan 134 años de futuro'. Con estas palabras, un dirigente territorial del PSOE advertía esta semana del miedo que existe en el seno del partido ante el desgaste que siguen sufriendo los socialistas a pesar del descontento ciudadano ante el Gobierno el PP. Una caída en picado que, según distintas voces críticas con la labor del secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, no creen en ningún caso que se pueda remontar con la actitud de mano tendida al Ejecutivo que mantiene la dirección de los socialistas en las últimas semanas. 

Es más, estos miembros del PSOE consultados por Público consideran que la posibilidad de lograr un pacto con el equipo de Rajoy podría incluso hipotecar el futuro del ya de por sí dañado principal partido de la oposición. Afirman que si se consensúa una posición común para llevar al Consejo Europeo del próximo día 27, los socialistas podrían ser percibidos por los ciudadanos como 'cómplices' del cumplimiento de las directrices de Bruselas.

Como ejemplo, argumentan que resultaría 'incoherente' presentar ante Europa un documento conjunto y defender una posición de país común ante los 27, y no asumir después la respuesta y el mandato de las instituciones comunitarias respecto al IVA o a las pensiones. Esta posición lastraría aún más el descrédito de los socialistas y esa idea, dicen, de 'que todos somos lo mismo, y de que no hay diferencia en votar al PSOE o al PP'. 

El equipo de Rubalcaba niega la mayor. Fuentes cercanas al secretario general argumentan que es precisamente la idea de cambiar el rumbo de Bruselas y la de acabar con los recortes y las subidas impositivas lo que motiva el acercamiento del líder del PSOE al presidente del Gobierno. 'El acuerdo es para pedir políticas de crecimiento y de empleo y nunca para asumir nuevos recortes', apuntan. 

Aseguran, además, que el pacto que está aún por determinar nacerá 'muy acotado' en la exigencia de políticas distintas a las puestas en marcha hasta ahora. 'Se centrará en el crecimiento', insisten fuentes de la Ejecutiva del PSOE, y será 'asimilable por cualquier partido de la socialdemocracia europea'. Por si hubiera alguna duda, desde la cúpula socialista recalcan que jamás darán el brazo a torcer en materia de pensiones, ni tampoco podrían aceptar nuevas subidas del IVA. 'El pacto lo podría suscribir el propio François Hollande', remachan.

Los críticos añaden un elemento más al debate interno. El hecho de que Rubalcaba se muestre hoy dispuesto a acordar con el presidente del Gobierno, tan sólo unos meses después de que exigiera su dimisión por su supuesta implicación en el caso de los papeles de Bárcenas. 'Esto es muy complicado de explicar a la militancia y, mucho más, a los votantes', lamentan.