Medio millar de empresas insisten en la reforma laboral para competir en el mundo
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Más de medio millar de empresas reiteraron hoy la urgencia de rebajar las cuotas empresariales a la Seguridad Social y flexibilizar el mercado laboral, simplificando la contratación con un tipo de contrato único, con el fin de mejorar la competitividad en el exterior y generar empleo.
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Esta es una de las conclusiones de la I Cumbre de Internacionalización organizada por el Consejo Superior de Cámaras de Comercio, la Asociación de Marcas Renombradas de España y el Club de Exportadores e Inversores españoles y que fue clausurada por el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián.
Dirigentes empresariales de las tres organizaciones exigieron al Gobierno, a través de un documento con más de 100 medidas, mayor colaboración entre todas las Administraciones, las empresas y los sindicatos para mejorar la "marca España" en el mundo.
En este sentido, abogaron por un Pacto de Estado por la Competitividad que promueva una asociación entre las marcas españolas y la imagen comercial del país.
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El presidente del Consejo Superior de Cámaras, Javier Gómez Navarro, entregó al ministro de Industria las propuestas empresariales y le pidió la "colaboración activa" de las empresas en los proyectos del Gobierno para impulsar la internacionalización, al tiempo que reclamó "reformas estructurales" para mejorar la fiscalidad de las empresas y el mercado de trabajo.
Miguel Sebastián mostró su acuerdo en aumentar el grado de cooperación entre todas las instituciones especializadas en el sector exterior y dijo que los problemas de cooperación no deben ser un "lastre" ante la actual crisis económica.
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Recordó la importancia de impulsar la imagen de las empresas españolas en el exterior y valoró el Plan Made in/by Spain, puesto en marcha en EEUU para "poner en valor la marca española".
Anunció que la próxima semana viajará los estados de California, Colorado y Texas (EEUU) para seguir "impulsando la imagen de las empresas españolas en el mercado estadounidense", con el fin de que participar en el "ambicioso plan fiscal de la Administración Obama".
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En este sentido, los representantes empresariales coincidieron en que España necesita urgentemente contar con una masa crítica de "marcas líderes" para competir en el mundo, y que actúen como "embajadoras" y "locomotoras" a la internacionalización del tejido empresarial.
Asimismo, el texto incluye medidas para rebajar los costes fiscales de las empresas, como la mejora del Impuesto de Sociedades, con deducciones ligadas a la doble imposición y a la reinversión, así como reformas para flexibilizar el mercado de trabajo, potenciando la movilidad laboral de todo tipo o con medidas que permitan "el ajuste temporal de las plantillas a las necesidades de producción".
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Además, urge a reducir el coste del empleo, "con una reducción de la fiscalidad sobre el factor trabajo" y con la creación de "cuentas personales de despido", esto es "fondos que permanecen asociados al trabajador, independientemente de la empresa en la que desarrolle su actividad".
El texto también pide desincentivar el absentismo y trasladar las fiestas laborales entre semana a los lunes, así como incentivos fiscales a la internacionalización, con la creación de una ventanilla única para inversiones en programas de Investigación, Desarrollo e Innovación.
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Entre las medidas relacionadas con el coste de financiación, destaca la necesidad de una nueva línea del ICO específica para operaciones de exportación, por un importe anual de al menos 1.000 millones de euros.
Para mejorar el capital comercial de España y sus marcas los empresarios proponen sustituir el actual Plan de Internacionalización de Marcas del ICEX por dos nuevos planes, uno dirigido a promocionar la estrategia "Made in/by Spain" y otro para las marcas con alto potencial internacional y que todavía no se han implantado en el exterior.