El Manchester United y el Arsenal sólo pudieron empatar en sus respectivos partidos del sábado y no aprovecharon el descanso del líder, el Chelsea, en una Premier League diezmada por las malas condiciones climáticas.

El United remontó y terminó empatando a 1-1 en su visita al Birmingham City, mientras que el Arsenal rescató un empate a 2-2 en casa frente al Everton.

Estos resultados mantuvieron las posiciones igual que al inicio de la 21ª jornada de liga, que sufrió la suspensión de siete encuentros por las nevadas.

El Chelsea, cuyo partido como visitante contra el Hull City fue suspendido, lidera la clasificación con 45 puntos en los 20 partidos disputados. Por detrás se sitúan el Manchester United, con 44 puntos en 21 encuentros, y el Arsenal, con 42 en 20.

El Tottenham Hotspur, cuyo partido contra el Liverpool también fue suspendido, ocupa la cuarta posición con 37 puntos en 20 partidos.

El Manchester United comenzó su partido contra el Birmingham por detrás en el marcador, después de un gol a los 39 minutos de Cameron Jerome.

Pese a no realizar un juego brillante, el Manchester arrinconó a su rival y terminó empatando gracias a un gol en propia de Scott Dann a los 63 minutos.

Por su parte, el Arsenal tuvo que sufrir para rescatar un empate frente a su público, que se mostró enfadado ante una mala actuación de los "Gunners".

El Arsenal goleó por 6-1 al Everton en el estadio Goodison Park al comienzo de la temporada, pero esta vez el equipo de Liverpool planteó otra estrategia y sorprendió al conjunto local cuando se adelantó mediante un cabezazo de Leon Osman a los 12 minutos de juego.

El Arsenal empató a los 28 gracias a un disparo del centrocampista brasileño Denilson que tocó en un defensor y descolocó al portero rival.

Pese a dominar el balón en la segunda mitad, bajo una intensa nevada, el equipo londinense volvió a quedar por detrás en el marcador cuando Steven Pienaar anotó el 2-1 para el Everton a 10 minutos del final.

El centrocampista sudafricano finalizó un rápido y letal contraataque con una exquisita definición por encima del portero español Manuel Almunia.

La insistencia del Arsenal en busca del empate dio sus frutos cuando otro tiro desviado ayudó a que el checo Tomas Rosicky convirtiera el 2-2 final en el tiempo de descuento.