Cargando...

Maillot oro sin ganar una etapa

Valverde, aún a la espera de si el dictamen del TAS le implica en la 'operación Puerto', se lleva su primera Grande

Publicidad

Ha sido el mejor. Alejandro Valverde (Caisse dEpargne) ha ganado la Vuelta 2009 con calma, sin exhibiciones, sin necesidad de exprimirse en las etapas de montaña, a la defensiva. Es su primera victoria en el mini Grand Slam del ciclismo (Tour, Vuelta y Giro) y lo confirma como uno de los grandes del ciclismo mundial en este momento. Sólo Contador o Andy Schleck parecen superiores a él.

Publicidad

Pero, sobre todo, Valverde ha despejado la gran incógnita, la que ponía en duda si es un corredor capaz de aguantar carreras de tres semanas. Lo ha conseguido y ha triunfado. Aunque lo haya hecho sin ganar una sola etapa, toda una paradoja.

Click to enlarge
A fallback.

Valverde se va convirtiendo en un ciclista completo. Es un escalador eficaz, explosivo en la subida. Tiene velocidad y es sólido en la contrarreloj. El próximo año debería ser uno de los candidatos a la victoria en el Tour de Francia... si la UCI le autoriza a correrlo. Porque sigue siendo un ciclista sub iúdice.

A Valverde aún le persigue un tremendo nubarrón desde 2006. Aquella maldita bolsa de plasma sanguíneo intervenida en una de las neveras de Eufemiano Fuentes en la operación Puerto llevaba una inscripción demoledora: "18-valv.piti". Tres años después, los laboratorios del Comité Olímpico Italiano dictaminaban que la sangre era de Valverde.

Publicidad

¿En qué punto se encuentra ahora el caso Valverde? El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) cuenta desde este verano con el recurso enviado por los abogados de Valverde. Se espera su resolución en las próximas semanas. Una resolución que podría ir desde dar la razón al corredor hasta decidir una sanción de dos años, como solicitan el organismo italiano y la Asociación Mundial Antidopaje.

La ironía es que Valverde podría recibir una sanción de dopaje en el momento en que más controlado está y más garantías ofrece. Ayer pasó su decimoctavo control de dopaje en esta Vuelta.

Publicidad

Mientras, el murciano disfruta de su triunfo. "Esta victoria tiene un sabor especial. Me faltaba una grande y me siento liberado, aunque ya sabía que era un corredor de tres semanas", señaló ayer Valverde. La dureza de esta vuelta ha sido reivindicada por el ganador. "Yo no creo que un Tour o un Giro sea más duro que esta vuelta", concluyó.

Publicidad