El MACBA reúne a partir de mañana unas 150 obras del comprometido artista barcelonés Joan Rabascall, de entre 1964 y 1982, un período crucial de su producción, prácticamente inédita en España, puesto que reside desde 1962 en París y en su país sigue siendo poco conocido.

Collages, montajes, ensamblajes, instalaciones o superposiciones forman el cuerpo de esta muestra, que invita al público a reflexionar sobre la omnipresencia de la comunicación, la instrumentalización del lenguaje, la violencia y la guerra o el machismo.

Rabascall, nacido en la ciudad condal en 1935, ha reconocido hoy en rueda de prensa que ha expuesto muy poco en Barcelona o en otras ciudades del Estado porque "en los años sesenta o setenta era muy difícil, incluso, encontrar un sitio en el que poder dar a conocer la obra".

Enmarcada en el denominado "pop arte europeo", aunque él dice no ser consciente de pertenecer a esa corriente, la obra de este artista muestra su preocupación por el individuo o por las ideologías, más que por el producto industrial y el consumo masivo.

La exposición, comisariada por el director del MACBA, Bartomeu Marí, y con obras procedentes de diferentes instituciones y colecciones privadas, se abre con un collage sobre madera fechado en 1964 y titulado "La fragilité des apparences", donde el artista denuncia la construcción del estereotipo de la imagen de la mujer como objeto sexual bajo la mirada masculina.

En la primera parte de esta exposición, se incluyen, además, los coloristas collages que trabajó entre 1964 y 1968, compuestos por imágenes impresas en papel, de revistas y diarios de la época, mayoritariamente franceses.

Llama la atención, asimismo, su emblemática "Bandera olímpica", una instalación que realizó para los Juegos Olímpicos de Múnich de 1972, aunque entonces no la pudo exhibir porque así lo impidió el ataque palestino a la delegación israelí.

Rabascall la ha vuelto a rescatar ahora para esta exposición y la ha rehecho, pasando de las diapositivas iniciales al DVD que se proyecta ahora en una gran bandera olímpica que ondea gracias al efecto de dos ventiladores.

Otro montaje es un vídeo, filmado con su amigo Benet Rossell, y titulado "Biodop", en el que desenmascaran la imagen publicitaria a partir de una película de una marca de brillantina.

La segunda sala del MACBA dedicada a este artista español cuenta con la curiosa introducción del juguete "23-F. Reflejo condicionado", un objeto formado por un escarabajo con la palabra "Tejero" escrita en su torso que remonta, gracias a un mecanismo, hasta un tricornio que sostiene un pequeñísimo televisor con la cara del rey Juan Carlos I reflejada.

Dentro de este espacio atrae la atención, especialmente, la instalación "Elecciones Show", de los años 1977-1978, en la que Rabascall reflexiona en torno a las primeras elecciones democráticas españolas, con tres proyecciones asincronizadas que muestran imágenes del destape (en una de ellas aparece la ahora baronesa Carmen Cervera), masas de manifestaciones y políticos en campaña.

Todo ello aderezado con canciones de la época que suenan de fondo y con carteles electorales de diferentes partidos políticos como el PSUC o la UCD esparcidos por el suelo.

La exposición se cierra con la serie "Spain is Different", de entre 1973 y 1977, formada por telas emulsionadas, sobre la campaña promovida por Manuel Fraga para potenciar el turismo de masas en el país.

También por las series "Paysages souvenir", una reflexión crítica sobre la relación entre historia, paisaje y turismo, y "Paisajes de la Costa Brava", a base de fotografías de los distintos parajes que Rabascall recorrió en su juventud y que se fueron transformando con los años.