El piloto español Jorge Lorenzo (Yamaha) manifestó hoy, después de ser el más rápido en los entrenamientos del Gran Premio de San Marino de MotoGP que vuelve "a estar contento".

El español no gana una carrera desde el Gran Premio de Italia a comienzos de julio y su rival en la lucha por el campeonato y líder del mundial, el australiano Casey Stoner (Honda), le ha batido en las tres últimas carreras y le saca 44 puntos a falta de seis pruebas para el final de la temporada.

Lorenzo, que en la primera sesión fue sexto, señaló en una rueda de prensa en el circuito italiano de Misano: "Estoy contento de pilotar y volver a disfrutar de la moto. Ha sido un cambio muy grande de la mañana a la tarde. He cambiado la moto bastante, es bastante parecida a la de Mugello (donde se corre el Gran Premio de Italia) y ha funcionado, ha funcionado muchísimo, podía frenar mucho más tarde, pilotar con confianza y mucho más rápido desde el principio".

El piloto de Palma de Mallorca explicó: "Teníamos dos motos y esta mañana solo he probado la de Indianápolis y por la tarde he probado la de Mugello y desde el principio ha ido muchísimo mejor".

Lorenzo también argumentó que este año el nivel ha subido respecto al año pasado cuando ganó su primer título mundial de la máxima cilindrada.

Preguntado por la visita del estadounidense Wayne Rainey, tres veces campeón del mundo de 500 c.c. entre 1990 y 1992, a la pista donde se quedó paralítico como consecuencia de una caída en 1993, el español elogió al americano: "Tener el valor de volver al circuito donde sucedió esa tragedia me merece todo el respeto. Espero que disfrute el fin de semana. El tiempo todo lo cura".

"Sería una buena idea dedicarle una victoria", consideró.

Negó que su tiempo de hoy en los entrenamientos libres fuera un mensaje a Stoner. Argumentó: "La presión se logra yendo veloz. Yo no busco primero meter presión y luego ir veloz, busco ir deprisa y luego meterle presión".

Sobre el pobre resultado del italiano Valentino Rossi (Ducati), undécimo hoy en una pista que está a una veintena de kilómetros de su casa, en la localidad de Tavullia, Lorenzo manifestó: "Un piloto al más alto nivel en la máxima categoría, si no tiene confianza con la moto no puede estar delante, y supongo que es lo que le ha pasado a Valentino esta tarde. No tiene confianza en la moto, los demás vamos muy fuertes y esto hace que esté lejos".