Cargando...

El legado de Gabriela Mistral vuelve a su pueblo al cumplirse los 120 años de su nacimiento

Publicidad

El legado literario de la poeta chilena Gabriela Mistral volvió a Vicuña, su ciudad natal, al cumplirse los 120 años del nacimiento de la ganadora del Premio Nobel de Literatura en 1945.

Publicidad

Se trata de libros, documentos, fotografías de sus álbumes personales, manuscritos de sus más importantes obras y de otras inéditas, además de archivos de audio con su voz, material que la autora de los "Sonetos de la Muerte" dejó a su amiga y albacea estadounidense, Doris Dana, antes de morir en Nueva York, en 1957.

Click to enlarge
A fallback.

La directora de Archivos, Bibliotecas y Museos de Chile, Nivia Palma, encabezó el martes la ceremonia en que las piezas que componen el legado de Mistral, nacida en 1889 como Lucila Godoy Alcayaga, fueron entregadas al Museo Gabriela Mistral, de Vicuña, a unos 500 kilómetros al norte de Santiago.

Las piezas que componen el legado de la poeta, que está sepultada en Montegrande, a unos cuantos kilómetros de Vicuña, permanecieron en poder de Dana hasta su muerte, a finales de 2006, cuando pasaron a manos de su sobrina Doris Atkinson, que decidió donarlos al Estado de Chile al año siguiente.

Publicidad

Los documentos y objetos del legado llegaron a Chile en diciembre de 2007, sin embargo, el estudio y clasificación de los mismos ha demorado su llegada a Vicuña.

Hasta ahora, sólo expertos habían tenido la oportunidad de conocer este legado, compuesto por más de medio centenar de documentos que desvelan aspectos íntimos de la también autora de "Tala", "Lagar" y el "Poema de Chile" y que para la gran mayoría de sus compatriotas sigue siendo prácticamente una desconocida.

Publicidad

Sólo en los últimos años se ha conocido su ferviente indigenismo, su admiración por el revolucionario nicaragüense Augusto Sandino, su respaldo a una reforma agraria que terminara con los latifundios en Latinoamérica y otras características que la convierten en una adelantada para su época.

Antes de llegar a su lugar definitivo en Vicuña, el legado de Gabriela Mistral recorrió otros lugares de Chile, incluido Montegrande, donde Lucila Godoy creció junto a su madre, una maestra rural.

Publicidad

Nivia Palma entregó además al Museo de Vicuña otros objetos incorporados recientemente al patrimonio mistraliano: dos mantas guatemaltecas que tienen bordado el nombre de la poeta chilena y dos piezas de cerámica veracruzana que le pertenecieron.

Publicidad