Iván Zulueta, genio de culto del cine español
El crítico de cine Diego Galán entrevista en su programa al director de ‘Arrebato’
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Diego Galán invita es el título del espacio que el conocido crítico cinematográfico dirige en el canal TCM (domingos, 22:00) y en el que rescata semanalmente una joya del cine que en su momento pasó desapercibida.
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Hoy arranca la segunda temporada con un invitado excepcional: IvánZulueta (Donosti, 1943). Con él charlará sobre su película Arrebato, en una entrevista relajada en la que, según Galán, Zulueta “se muestra como si estuviera en el salón de su casa, y en la que se habla de él y de su situación de bloqueo”. Iván Zulueta es conocido por ser una de las voces ausentes, y sin embargo más presentes del cine español, al igual que Victor Erice.
“Algo en común tienen, aunque Zulueta no ha tenido oportunidades, o ganas, para acometer otras películas”, dice Galán.La obra cinematográfica de Zulueta, que ha corrido pareja con su trabajo como pintor y dibujante –realizó carteles para Almodóvar o Borau– es intensa, personal y desarrollada casi íntegramente dentrodel cortometraje.
“Es allí donde dice que se encuentra su obra, en ese material vanguardista”, asegura Galán. El director vasco ya se había estrenado en la dirección con Un, dos, tres al escondite inglés (1970), una película musical al estilo de aquellas películas de The Beatles dirigidas por Richard Lester, que sin embargo firmó José Luis Borau. “En aquella época se necesitabaun carné profesional que otorgaba el Sindicato de Artistas, una forma de controlar lo que se hacía, y como Iván no lo tenía fue José Luís Borau el que se lo prestó firmando la película por él”, afirma Galán.
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Director maldito
Pero Arrebato, rodada casi 10 años después, es su obra cumbre, la película maldita del cine español por excelencia. “La he vuelto a ver un par de veces para preparar el programa y me parece enigmática, hay cosas que entiendo y otras que se me escapan. Fue una película con mala suerte, estrenada de tapadillo en el cine Azul de Madrid y luego rescatada por los Alphaville, donde se estuvo proyectando de madrugada durante más de un año y ahí fue descubierta de nuevo”.
El programa es la excusa para reencontrarse con los pasos perdidos del cine español y con un año clave, 1980, en el que se comenzaba a hablar de “jóvenes” talentos como Fernando Trueba, Pilar Miró o Fernando Colomo. “Fue un momento de efervescencia creativa, de ilusión, en el que mucha gente comenzaba a hacer cosasen un momento en el que pensábamos que el Franquismo ya había desaparecido, aunque al año siguientenos dimos cuenta, con Tejero, que seguía ahí. Era otro modo de convivir y de crear. Ahora la vida pública parece más mediocre y eso se nota también en el cine que vemos”, apostilla Galán.