El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, ha asegurado hoy que ha aceptado renovar su contrato con el Barcelona una temporada más porque se siente motivado y porque "no había ningún motivo para no hacerlo".

En cambio, ha asegurado que el día que no esté apasionado o no le queden fuerzas para motivar a sus jugadores será el momento de dejar el club. De todas formas, y siempre con la prudencia que le acompaña, el preparador barcelonista ha asegurado que si por él fuese, más que por un año hubiese firmado "por medio año".

El técnico azulgrana ha comparecido hoy por primera vez ante los informadores después de conocerse que había llegado a un acuerdo con el club para ampliar su compromiso con el Barça hasta el 30 de junio del 2012, hecho que ha motivado una gran expectación en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva.

De hecho, más de la mitad de las preguntas que se le han formulado en los 45 minutos de conferencia de prensa en la Ciudad Deportiva se han referido a su renovación, que finalmente se firmará dentro de unas semanas en las oficinas del club.

"Cuando vea que sobro, que no tengo pasión y que me falta fuerza, cuando sienta que no esté bien, lo dejaré", ha señalado un Guardiola, al que se ha visto relajado por haber superado una cuestión administrativa que tanto había preocupado al entorno azulgrana, que no entendía que el técnico no hubiese renovado ya.

Respecto a los motivos que le podrían empujar fuera del Barcelona, Guardiola ha destacado que uno pueden los resultados, cuando estos sean adversos -"y, por lo tanto, me echarán"-, o cuando tenga que decir "adiós con normalidad porque tocará irse".

"Si hubiese podido firmar por medio año, lo habría hecho. Necesito verme cada día si estoy con fuerza. El tiempo lo desgasta todo. Tenemos que estar atentos. Si la cosa va bien, podremos seguir juntos", ha añadido.

Guardiola ha señalado que era "obvio" que en ningún caso se había planteado una segunda vía de no haber llegado a un acuerdo con el Barcelona, porque la renovación por el Barça parecía un objetivo inevitable, ya que "no existían motivos para no continuar".

También ha destacado Guardiola que el hecho de que el club haya valorado la continuidad de todos sus ayudantes le ha aplanado el terreno.

Durante el periodo de negociación todos los jugadores del Barcelona se han decantado públicamente por la continuidad de Guardiola, hecho que se evidenció ayer en el entrenamiento cuando el grupo recibió con un sonoro aplauso al entrenador en la Ciudad Deportiva.

"Ellos me quieren, pero cuando esté otro lo querrán igual. Los jugadores compiten para ganar, porque es entonces cuando viven mejor. Los jugadores quieren a entrenadores que les ayuden a desarrollar su potencial. Y así tiene que ser", ha reflexionado Guardiola.

"Sólo me veo en el Barcelona un año más, y ya se me hace largo pensar en más tiempo. Que no renovase no tenía que ver con las dudas. Como aquí, no estaré en ningún lugar. Pero aquí las cosas te las tienes que ganar. Y lo hecho, hecho está. Yo no puedo vivir de lo que he hecho. Tiene que haber pasión", ha señalado.

Finalmente, el entrenador del Barcelona ha apuntado que ha observado "cosas" dentro del club y vestuario que le empujaron a cerrar su renovación.

"No me quedo porque sé que ganaremos. No sé los títulos que vamos a ganar porque nos queda mucho por sudar", ha concluido el entrenador azulgrana, quien ha señalado que a diferencia del primer contrato que firmó hace tres años ahora sabe que están "más cerca del final que del principio".