El presidente del BBVA, Francisco González, aseguró hoy que en el siglo XXI triunfarán las entidades que mejor utilicen los avances tecnológicos como Internet y los combinen con la operativa en sucursales, en las que se ofrecerán servicios financieros y no financieros, como ya hace el banco.

González hizo estas declaraciones durante su visita al stand del BBVA en la 47 edición de la Feria Internacional de Informática Multimedia y Comunicaciones (SIMO), donde la entidad acudía por primera vez y donde fue entrevistado en el canal de televisión IP, que emite para los empleados desde el pasado 8 de junio y hoy lo hizo para el público presente en la feria.

"Ahí está la gran apuesta y ahí están los ganadores del siglo XXI, explicó González, que se mostró convencido de que el BBVA será uno de ellos.

"Estamos asistiendo al comienzo de una revolución extraordinaria dentro de nuestro negocio y en estos momentos, con todos los cambios que se están operando en la empresa financiera y todas las turbulencias, es evidente que nuestro banco tiene una oportunidad única por su fortaleza financiera y por su presencia internacional de liderar ese movimiento a nivel global", aseguró.

La apuesta del BBVA por la tecnología es "absolutamente ganadora", dijo González, que añadió que para ganar "hay que tener una visión solida y un gran equipo de gente que entiendan este movimiento y no hay en la banca mundial muchas personas que hayan tenido la visión y la experiencia para liderar este movimiento", algo que sí tiene el BBVA.

Y dentro del gran objetivo de la entidad de trabajar por un futuro mejor para las personas, BBVA está inmerso en una auténtica revolución tecnológica que se está traduciendo en cambios en todos los aspectos, explicó, tanto en el diseño de las oficinas, como en la comunicación interna y con los clientes.

"El banco del futuro -explicó González- que estamos construyendo está basado en envolver de alguna forma la vida de todas las personas, por eso ya no hablamos de clientes sino de personas, para intentar evolucionar desde un banco convencional hacia una gran compañía de servicios financieros y no financieros".

De hecho, la entidad tiene desde hace pocos meses una oficina "multiusos" en Madrid, un espacio diáfano de cerca de 400 metros cuadrados, donde no sólo se pueden contratar productos financieros, sino también tomar un café en la cafetería Juan Valdez, contratar un viaje, cambiar de móvil o adquirir un apartamento en la costa.