En el paquete de medidas que el Ministerio de Trabajo presentará este viernes al Consejo de Ministros, se lleva un compromiso del Gobierno de ampliar hasta con 10.000 millones de euros el presupuesto del Inem para que pueda hacer frente al pago de todas las prestaciones por desempleo.

Aunque por ahora la medida es sólo un compromiso, al ritmo que está subiendo la nómina de las prestaciones contributivas y asistenciales la promesa del Ejecutivo se tendrá que hacer pronto realidad.

En enero, el último dato conocido de pago de prestaciones, la nómina del paro subió hasta los 2.500 millones de euros, un 63% más que hace un año. Este ritmo de crecimiento es sostenido, ya en diciembre se avanzó a la misma velocidad.

Más subsidios asistenciales

Por lo pronto, 2,4 millones de parados reciben algún tipo de ayuda lo que, según la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, es probablemente la cifra más alta de la historia. Además, se ha conseguido que el plazo medio de reconocimiento del derecho sea de 8 días (cinco menos que hace un año) pero desde Trabajo aspiran a bajar aún más este plazo.

Los beneficiarios de prestaciones contributivas (1,6 millones) han crecido a un ritmo más intenso que los de las rentas asistenciales. Sin embargo, sigue existiendo un amplio colectivo que está apuntado al Inem y no recibe ningún subsidio, al menos de las arcas del Estado.

Así, si se descuenta a los parados que no han tenido empleo anterior (en enero 269.000), aún restan 600.000 que no reciben nada. Según Trabajo, mucho de ellos podrían estar recogidos bajo el paraguas asistencial de las comunidades autónomas, que tienen esta competencia, y
el ministro del ramo, Celestino Corbacho, ha insistido en que refuercen Esta tarea.

Además, destaca que el colectivo de extranjeros que reciben una prestación se duplica con respecto a hace un año. Son los ciudadanos comunitarios (donde ya se incluye a los rumanos) los que más rápidamente han pasado a recibir el paro.

El gasto medio mensual que se hace en cada beneficiario de prestación contributiva (incluyendo la cuota de la Seguridad Social) es de 1.068 euros pero la cuantía bruta media que recibe cada desempleado está en 833,2 euros, un 5,6% más que hace un año. Para las asistenciales es siempre 421,79 euros. Los hombres cobran más que las mujeres, de media, por el mayor tiempo de cotización o los mayores sueldos.