Fuertes protestas en Italia en vísperas del estreno del G-8
Más de 60 detenidos. Lula dice que la cumbre "ya no tiene razón de ser"
Publicidad
Silvio Berlusconi, primer ministro italiano, ha ordenado fortificar el municipio de LAquila, donde comienza hoy la cumbre del G-8 que forman los países más ricos del mundo (Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, Canadá, Japón, Estados Unidos y Rusia) y a la que España acude como invitado. Los aproximadamente 15.000 policías enviados a blindar, sobre todo, LAquila y Roma actuaron contundentemente contra las primeras manifestaciones antiglobalización, que se saldaron con más de 60 detenidos.
Publicidad
En la capital, 35 personas fueron arrestadas tras incendiar contenedores de basura y cortar el acceso a la autopista que va a LAquila y otras 21 en Turín. Unas 300 personas se concentraron en la Universidad romana de La Sapienza para protestar por las detenciones, mientras siguió la ocupación de rectorados en Palermo y Bolonia. También fueron detenidos cinco jóvenes franceses que iban en una furgoneta, en LAquila, a los que la policía requisó bates de béisbol antes de dejarlos en libertad.
Merkel apuesta por el G-20
Berlusconi quiere evitar elG-8 de hace ocho años cuando los carabinieri mataron a un manifestante de 23 años. A las medidas de seguridad, se une un plan del Gobierno para evacuar en helicóptero a los mandatarios si los temblores de tierra del viernes dan paso a un terremoto, el gran temor tras el que devastó LAquila.
Publicidad
El día previo a una cumbre supuestamente orientada a lograr soluciones contra la crisis, la canciller alemana, Angela Merkel, dijo que el G-8 no tiene capacidad para ello e insistió en que debe ser el G-20, con los países emergentes, el foro para resolver los problemas.
En esa línea, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó que el G-8 ya no tiene razón de ser como foro internacional. "La economía mundial necesita foros multilaterales", dijo. "No es posible seguir invitándonos a la cumbre para tomar el café más caro del mundo y para la foto".
Publicidad
Junto al presidente francés, Nicolas Sarkozy, Lula pidió un "cambio en la gobernanza mundial".