Equo ha denunciado la carrera de burros de Areta, en Llodio (Álava), adjuntando unas fotografías en las que se pueden ver 'las heridas que presentaban algunos de los animales, ya antes de la carrera, y los golpes que reciben en la cara y en diferentes partes del cuerpo por parte de los jinetes, antes y mientras se lleva a cabo el evento'. A través de un comunicado, la formación ecosocialista ha asegurado que las carreras de burros 'vulneran en sí la Ley de Protección Animal, ya que esta ley prohíbe imponerles a los animales la realización de comportamientos y actitudes ajenas e impropias de su condición'.

La portavoz de Equo Ana Moreno ha afirmado que 'queda claro que la condición de un burro no es competir en un carrera urbana, no están preparados para esto, como mucho sólo trotan, pero además el asfalto provoca inestabilidad y caídas'. Moreno ha señalado que 'esta misma ley prohíbe maltratar a los animales o someterlos a cualquier práctica que les pueda producir sufrimientos o daños y angustia'.

En este sentido, ha manifestado que 'el ambiente festivo provoca en los animales una gran angustia, sufrimiento, esto los paraliza, por lo que son golpeados para que lleven a cabo la carrera'. Por ello, ha sentenciado que 'en las carreras de burros se humilla y maltrata a los animales'. Equo Euskadi ha señalado que en las fiestas patronales de Llodio 'se llevan a cabo otros festejos asentados en el maltrato animal, como son las novilladas, vaquillas y encierros'.

Por ello, el partido verde ha instado al ayuntamiento alavés a que 'evolucione' y lleve a cabo unas fiesta 'más éticas, acordes al siglo en el que vivimos'. Además, le ha instado a que siga los pasos de municipios como Sopuerta y Galdakao, donde a iniciativa de los propios equipos de gobierno se ha abolido todo tipo de maltrato animal. En Galdakao, concretamente, se ha suprimido la carrera de burros al considerar que, durante su celebración, se infringía sufrimiento a los animales.