Directoras hartas y algo de cine
Sitges sirvió de foro contra la desigualdad de géneros y acogió el estreno de Celda 211
Publicidad
Por un momento el festival de Sitges pareció alejarse del cine fantástico y encaminarse hacia el documental. Ocurrió ayer, durante la comparecencia de la directora Inés París, presidenta de la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA), en la que afirmó que la incorporación de la mujer a este ámbito está actualmente "estancada". París señaló que las cifras denotan este estancamiento y ha puesto como ejemplo que en los últimos diez años sólo un 7% de las películas están dirigidas por mujeres y sólo un 15% de los guiones los firman féminas.
Publicidad
En su opinión, en este ámbito "el sexo sí que importa como dicen los datos, de manera que, si ya es difícil hacer cine en este país, todavía lo es más si eres mujer". Para Paris, el cine y la televisión son instrumentos de poder, "puesto que crean las imágenes de lo que somos, y en este proceso las mujeres estamos siendo sistemáticamente excluidas".
"Las mujeres estamos siendo sistemáticamente excluidas"
Pero la jornada dio para más. Daniel Monzón presentó Celda 211, un emocionante thriller carcelario con un imponente Luis Tosar en el papel de Malamadre y el descubrimiento como actor del joven Alberto Ammann.
Publicidad
Durante la proyección de la película en el auditorio del certamen, el público quedó enganchado en sus butacas y no dejó durante sus 111 minutos de metraje de seguir las peripecias de los amotinados, con Malamadre al frente, y de un funcionario en su primer día de trabajo.
Durante una multitudinaria rueda de prensa, Monzón señaló que siempre trata de hacer "lo que le emociona" y, en este caso, con guión de Jorge Guerricaecheverría, ha construido una película coral, con mucha acción e inesperados giros. Tras pasar por los festivales de Venecia y Toronto, el director reconoció que está cumpliendo su sueño de lograr que el espectador "entre dentro de la película".
Publicidad
El director Jaume Collet-Serra (Barcelona, 1974) presentó su tercera película, Orphan, que cuenta con la producción, entre otros, de Leonardo DiCaprio. La cinta sigue la estela de filmes con personajes infantiles perversos, con momentos de suspense, en una casa de diseño. El filme ya se ha estrenado en EEUU con más de 40 millones de dólares recaudados y además se ha distribuido en México, Corea, Argentina, Canadá, Grecia o Reino Unido. En este último, la interpretación de la protagonista, Isabelle Fuhrman (de 12 años) obtuvo buenas críticas.