El antiguo directivo de la división de Redes fijas de Siemens, acusado de 58 casos de desfalco en la compañía, ha admitido las imputaciones en el primer proceso penal por los casos de corrupción en el consorcio tecnológico alemán.

En el juicio, que comenzó hoy en la Audiencia de Múnich, Reinhard S. dijo que las acusaciones de la fiscalía contra él son "en principio" verdad.

Reinhard S. explicó que, con la conformidad de la dirección de ese área, creó un sistema mediante el que empleó 53 millones de euros (83 millones de dólares) del presupuesto de Siemens para poder pagar sobornos.

Añadió que junto con el antiguo director de Finanzas de la división de Telecomunicaciones Michael Kutschenreuter redujo notablemente las reservas para el pago de sobornos en esta división de Siemens.

Antes de 1998, cuando esta práctica empezó a ser sancionable con un cambio de legislación, se desviaban a las llamadas "cuentas discretas" cien millones de euros y más anuales en la unidad de Telecomunicaciones de Siemens, según el acusado.

Reinhard S. explicó que junto con Kutschenreuter decidió en 2002 reducir el sistema de pago de sobornos y suspenderlo en algún momento.

La fiscalía de Múnich (sur de Alemania) imputa a Reinhard S. haber creado un sistema de cuentas ficticias en el área de Telecomunicaciones de Siemens para pagar sobornos en la concesión de pedidos en el extranjero.

En el juicio están presentes como testigos el antiguo presidente de Siemens Heinrich von Pierer y el director de Finanzas en funciones, Joe Kaeser.

La fiscalía de Múnich exculpó a comienzos de abril a Pierer del sistema de pago de sobornos en la compañía al considerar que el ejecutivo no sabía nada de esta práctica ya que, según las investigaciones llevadas a cabo hasta ahora, no hay indicios de que Pierer tuviera conocimiento de esos pagos.

Los escándalos de corrupción han costado a Siemens unos 1.500 millones de euros (2.340 millones de dólares) desde que se conocieron los casos, según cifras publicadas a comienzos de diciembre.