La artista española Cristina Iglesias presentó hoy, en el Instituto Cervantes de París, una exposición de fotografías y vídeos que ofrece una escueta visión de la obra de esta polifacética creadora.

Se trata de un conjunto de trabajos procedentes de anteriores muestras de Iglesias y otras inéditas combinadas entre si por la artista para el Cervantes parisiense.

La exposición consta de cuatro espacios con personalidad propia.

El primero recoge cuatro serigrafías sobre seda procedentes de la serie "Fuga a seis voces" que presentó en la pasada feria de arte contemporáneo de Arco de Madrid.

"Refleja imágenes en construcción efímera para estudiar los espacios de la escultura. También son reflexiones sobre la aportación del tapiz a la historia del arte", indicó.

En el segundo espacio aparecen cuadros sobre metal que reflejan la percepción del espacio de la artista y que están impregnadas del mismo estilo que Iglesias dio a la puerta que creó para la ampliación del madrileño Museo del Prado de Eduardo Moneo.

"En esta parte me interesa reflejar cómo el arte puede revelar el cambio que se genera con un pequeño gesto", aseguró.

Una serie de aguafuertes que se exponen también por primera vez constituyen la tercera parte de la exposición, centrada en los bocetos pintados por la artista sobre fotografías para preparar una de sus obras.

La muestra termina con la proyección de un vídeo de una veintena de minutos, montado en colaboración con su hermana Lourdes, en el que Iglesias da una visión propia de su obra a través de imágenes de sus creaciones.

Esta mezcla da originalidad a la exposición de Iglesias, que con anterioridad ha mostrado sus creaciones en algunas galerías parisienses y en el Centro Pompidou, donde participó en 2005 en la gran exposición "Big Bang" sobre el arte en el siglo XX.

"Yo no hago las obras para un espacio concreto, me gusta hacerlas para un sitio pero teniendo en cuenta que deben seguir teniendo vida, que pueden ser adaptadas a otros lugares", explicó la artista.

A esta norma escapan algunas de las esculturas de Iglesias que son fruto de la colaboración con arquitectos, como las puertas de la ampliación del madrileño museo del Prado de Rafael Moneo o la fuente de Amberes que inauguró en septiembre de 2006.

Conocida esencialmente por sus esculturas, Iglesias llevó al Cervantes de París cuadros y un vídeo, fruto de su experimentación con otros lenguajes artísticos.

"Un artista siempre tiene tentación por explorar con nuevos lenguajes. Yo no lo he hecho más por miedo a esas nuevas expresiones", aseguró.

Iglesias negó que su incursión en el mundo del vídeo sea la antesala de un salto al cine.

"Ya había hecho vídeos anteriormente, pero siempre desde un punto de vista documental, entendido como una visita guiada de mi visión particular sobre mi obra", aseguró.

La artista prepara otros proyectos audiovisuales, como un documental sobre el fondo marino mexicano junto a otros artistas.

En cuanto a la colaboración con su hermano Alberto, músico habitual de los filmes de Almodóvar y reciente premio Nacional de Cinematografía, Iglesias aseguró que no lo han hecho antes por "pudor".